De entrada aclaro que no voy a incursionar en un
tema metafísico ni espiritual –porque ello corre por cuenta de cada persona–
sino a partir del aporte y el rol muy valioso que la consciencia moral tiene en nuestra vida anímica. Además, porque
pasa a ser un factor clave en los interrogantes básicos de partida que
necesitan “responderse” todos aquellos que se interesan por el Personal
Branding.
Por
qué es importante
Es bueno recordar que somos seres humanos por el hecho
de tener consciencia de nuestro yo. Y lo que en la consciencia moral nos acompaña, acompaña también a nuestro yo.
Cuando el niño pequeño no tiene aún internalizado su
yo, nos damos cuenta rápidamente de ello por la forma en que se expresa. Como
ya sabe cuál es su nombre, para referirse a cualquier situación personal se
manifiesta diciendo, por ejemplo: Carlitos tiene frío; Carlitos tiene hambre;
Carlitos tiene sueño;…
La consciencia
moral es una fuerza o impulso interior –en tiempos antiguos sólo obraba
desde afuera. Pero para poder percibir esta fuerza como algo interior, fue
necesario recorrer la evolución humana. ¿Esto que nos dice? Que la consciencia moral fue evolucionando con
el hombre y así éste logró “conquistarla”. Sin embargo, se establece en nuestro
yo y vamos tomando conocimiento de ello a medida que también evoluciona nuestro
yo.
Si bien filósofos y hombres de la ciencia han dado
sus puntos de vista sobre la consciencia moral –los más extremistas hasta han
llegado a minimizarla, diciendo que es una mera
“ilusión”. Pero lo cierto es que de un modo primario y básico llegamos a
“vivenciar”, nuestra consciencia moral,
como la “voz” que en determinados momentos nos llega a palpitar en nuestro
corazón, “diciéndonos” qué está bien o no, acerca de lo que hay que hacer para
poder estar de acuerdo consigo mismo y sobre lo que hay que abstenerse de
hacer.
Si queremos precisar aún más el ámbito de la consciencia moral, es en el alma humana
en donde se manifiesta como una fuerza primaria, mucho antes de que nos hayamos
formado ideas más elevadas acerca del bien y del mal; incluso antes que hayamos
adoptado una “doctrina” moral vía la razón.
Quizás alguno de ustedes vivenció la consciencia moral cuando, desde su
interioridad, percibió una cierta “tranquilidad”. Concretamente, cuando
pudieron decirse que han hecho algo que estuvo bien y por ello están plenamente
de acuerdo y satisfechos. Lo opuesto también se percibirá en la interioridad,
con el grado de angustia o disconformidad, por no haber obrado bien.
En los tiempos de hoy muchas personas no se dan
cuenta del atributo valioso que su consciencia
moral les puede aportar como “consejera” de lo que más les conviene hacer.
Por supuesto que en peor situación se encuentran todos aquellos que, en su
mano, se les “enquistó” un objeto material que los “obliga” a estar pendientes de
casi todos los sucesos exteriores, en una frecuencia 24/7, y con la mirada baja.
¿Esto que nos dice? Que también “existen” impulsos externos intangibles que
tratan de evitar que las personas puedan desarrollarse,
a partir de su interioridad. En algunos casos, sin que éstas se den cuenta de
ello. En otros, porque los inquieta el tener que “dialogar” consigo mismo.
Las
preguntas del Personal Branding
Cuando en un momento de la vida uno siente que ha
llegado el momento de “poner en claro” para qué estoy en el planeta Tierra, se
necesitará dar respuesta por lo menos a dos preguntas básicas:
- Cuál es mi misión
en la vida.
Ello tiene que ver con la razón y el sentido básico
de mi existencia. Además, cada uno de nosotros no está aquí por “casualidad” –sus
padres sólo han sido los que biológicamente lo hicieron posible– porque en el
trayecto de la fecundación el cromosoma portador de tu individualidad fue el
único que lo logró; el resto se fue quedando en “el camino”. En consecuencia,
has venido en la presente circunstancia histórica de la humanidad para hacer
algo concreto, no para llegar a ser necesariamente un “número más”.
Por supuesto que saber cuál es mi misión no es para nada fácil, sobre todo
en los tiempos que corren, tal como lo había manifestado anteriormente. Lo
único que conocemos es que es un interrogante clave, vital y muy personal. Pero
lo bueno es que ahora ya sabes que tienes “a mano” un recurso y un aliado
“excepcional”: ¡La “voz” de tu consciencia
moral!
- Cuál es mi vocación.
Teniendo en claro lo anterior, cada uno podrá darse
cuenta –en función de sus habilidades o talentos– cuál es el trabajo,
emprendimiento o profesión que no sólo te permitirá hacer realidad tu misión, sino que además es lo que
terminará dando un sentido a tu vida.
En este punto y si lo consideras necesario, te podrá
llegar a orientar un profesional siempre y cuando lo haga de un modo imparcial
y sin omitir tu misión. Pero también
podrás hallar “la respuesta” en la medida que escuches a tu “voz” interior, es
decir, a tu consciencia moral.
¡El portador de Tu Marca Personal sólo
transciende en lo suyo recién cuando tuvo en claro las respuestas a las dos
preguntas básicas; caso contrario, al tiempo se dará cuenta que lo realizado
fue más bien una “ilusión” –aunque se haya convertido en un millonario– porque
se trató de algo que, en definitiva, no fue lo que en realidad debió ser!
José
Podestá