Menos Gerentes, Mayor Creatividad

25 diciembre 2011 ·

Durante décadas el sistema de organización en las empresas, especialmente las grandes, asignaba a una función y distribución prácticamente estratégica al personal jerárquico, especialmente a los gerentes. Como el proceso conducente radicaba en la centralización y el verticalismo de las ejecuciones y control, era fundamental y necesario contar con un staff “leal” y comprometido con las “directivas” provenientes de la cima de la organización.

De esta forma, y sin darse cuenta, la empresa se fue nutriendo de una gran mayoría de empleados dependientes, incluido los gerentes, de las tareas que se debían llevar a cabo. Hoy siguen presentes en muchas organizaciones, constituyendo el “rebaño” de iguales que por haber sido entrenados en “hacer lo que se les diga”, no suman ningún valor en sus actividades. Son, en definitiva, fieles exponentes de un estilo cultural que reducía al ser humano al rol de servidor. La clásica expresión, “aquí el que piensa es el gerente”, ilustra muy bien esa época.

Hoy la realidad impone prácticamente lo opuesto. En un contexto de sobreoferta de productos y servicios –que incluso se parecen entre sí– sumada la exacerbada competencia reinante, hace que las empresas deban descentralizar al máximo sus procesos de gestión, poniendo el foco en la creatividad e innovación continua. Las nuevas ideas ya no son el atributo distintivo de la plana mayor de la empresa sino de todos los empleados que la integran, incluyendo al cadete.

La organización que aprende

Esta es la máxima que, con orgullo, define y predica la empresa automotriz Toyota. Quizás ha sido pionera en lo suyo, pero gracias a esta práctica que involucra en el proceso de gestión a todo el personal, logró hace unos años convertirse en el líder global rentable de la industria automotriz, desplazando luego de siete décadas de reinado a la compañía General Motors.

Vemos, entonces, que la práctica y reglas de oro del ayer ya no funcionan. En cambio, las ideas y el conocimiento han pasado a ser el basamento indispensable sobre el cual se construye hoy la ventaja competitiva.

En una organización que aprende ya no se necesita la estructura burocrática de supervisión, control y “bajada de línea”. Para ser ágiles, a pesar de ser grandes, se necesita algo más importante que la práctica del empowerment: Que los empleados tengan bien en claro cuál es su contribución a la estrategia corporativa y que se encuentren estimulados y respaldados para sugerir, cambiar, mejorar e implementar las mejores soluciones diarias que consideren pertinentes. Luego, en las reuniones semanales de gestión, podrán dar explicaciones del qué, el cómo y el por qué hicieron las cosas. Y si algo salió mal, por error o equivocación, podrán también informar qué enseñanzas capitalizaron de ello. Así es como hoy las empresas líderes e innovadoras vienen trabajando y aprendiendo.

¿Qué pasa cuando uno se siente libre?

La realidad señala que en estos casos el empleado termina haciendo lo que considere es lo mejor, en lugar de hacer lo que le dicen que debe hacer; en el ayer, este acto de soberbia del gerente hacia su gente lo hacía convencido de que era lo “definitivamente correcto”. Hoy esto es un gran disparate, porque ningún ser humano es dueño de una verdad revelada y absoluta; apenas logramos, a veces, tener algún momento de inspiración para sumar un mejor punto de vista.

¡La realidad impone algo que está implícito en el portador de Tu Marca Personal: ser uno mismo, no como todos los demás. La diferencia, no la uniformidad, es lo que hace que los otros vean que uno no es un clon y que tiene algo de valor para brindar!

José Podestá

El Cambio Esperado

18 diciembre 2011 ·

Una expresión popular dice que cuando al país le va bien, a uno también le puede ir bien. Por tanto, en la medida que exista previsibilidad en los acontecimientos, estabilidad político-social y un crecimiento económico razonable, es altamente probable que la mayoría de los ciudadanos puedan capitalizar y ser, en lo suyo, un caso concreto de bienestar.

¿Por qué se piensa así?

Porque en décadas pasadas tal manifestación fue sentando precedente de ocurrencia y confirmación. Sin embargo, en la nueva economía no todas las reglas de oro del ayer siguen funcionando. Por supuesto que esto no significa no creer en las instituciones o dejar de ser razonablemente optimistas. Pero sí es importante darnos cuenta que los procesos de cambios permanentes a los que estamos expuestos y los avances tecnológicos aplicados en múltiples disciplinas, hoy no se traducen en las mejoras personales que, seguramente, todos aspiran y desean alcanzar, incluso en el ámbito laboral-profesional.

¿Qué nos dice el hoy?

Si la réplica del bienestar no se da en la medida e intensidad deseada, seguir esperando por ello no tiene sentido. Significa, entonces, que la fórmula mencionada al principio no debiera ser un factor de consideración, por la sencilla razón de haber quedado afuera de nuestras posibilidades.

En consecuencia, si del contexto uno ya no puede depender, se necesitará ser uno mismo un factor de cambio. Esto implica ponerse a trabajar en la definición y planificación de un proyecto, a partir del cual se deja de lado el anterior paradigma-modelo de la relación de dependencia.

Por supuesto que aquellos que tienen la posibilidad de realizar su carrera profesional en una empresa, y están convencidos de ser ésta la mejor opción para el logro de su visión, será perfectamente válido continuar por dicha senda. Pero en el caso de la gran mayoría que hoy siente peligrar su estabilidad laboral, por las razones de contexto ya mencionadas, o bien están en la búsqueda infructuosa de un empleo en una organización, quizás lo razonablemente prudente sea salirse de ese círculo vicioso y pensar en una solución diferente.

Yo SA

Ya hemos mencionado en otras oportunidades que los tiempos imponen pensar y afrontar, con realismo y decisión, la búsqueda de una actividad-profesión independiente como solución-respuesta a la escasa oferta laboral existente, incluso a nivel global. Ello no excluye que uno llegue a trabajar para una empresa, pero en este caso lo estaría haciendo a tiempo parcial y como proveedor de un servicio puntual. Si luego se diera la oportunidad de poder incorporarse a la compañía a tiempo completo, y ello estuviese en línea con el proyecto personal, tampoco invalidaría seguir manteniendo, en el sentir y el pensar, la actitud de afrontar los hechos bajo la convicción de que uno es Yo SA.

En la medida en que se asuma esta actitud-decisión, uno dejará de ser un dependiente de los vaivenes del contexto, es decir, del cambio esperado. En contrapartida, se estará haciendo cosas que sí tienen sentido para uno mismo, porque parten de un proyecto personal que cuenta con una clara visión de llegada.

¡Los tiempos que corren son muy propicios para el desarrollo y posicionamiento de Tu Marca Personal. Más aún, es la mejor respuesta para capitalizar las reglas de oro del hoy!

José Podestá

Exceso de Información

11 diciembre 2011 ·

A partir de la globalización –año 1990– hemos comenzado a transitar por la nueva economía de la información y el conocimiento. En esa época aún no estaba disponible la Internet, que recién se liberó al uso privado y comercial a partir de 1993. Hoy sabemos lo que implica el acceso democrático a la información que está allí disponible para que las personas puedan procesarla y transformarla en conocimiento aplicado.

A diferencia del ayer, hoy la información fluye, se renueva e incrementa incesantemente. Ello obliga, por tanto, a ser muy disciplinado para no perder el objetivo y terminar siendo una víctima del exceso. Sin embargo, y aunque llame la atención, no es lo que le pasa a la mayoría de las personas. Por el contrario, estar “al día” en lo básico y estratégico es sólo un atributo de las personas que tienen bien en claro su misión y visión.

¿Cuál es el problema?

Básicamente, dos:

a. A pesar de la facilidad del acceso a la información y contenidos diarios, son muy pocos los que capitalizan eficazmente esta oportunidad.

b. A pesar de constituirse el conocimiento en una ventaja competitiva en aquellos que lo aplican en su trabajo o profesión, la mayoría de las personas demuestran indiferencia o desinterés. Con ello, y sin darse cuenta, van postergando su posicionamiento personal y eventual estabilidad laboral.

Evidentemente hay una percepción-imagen incorrecta de lo que implica trabajar en relación de dependencia, tema del cual ya nos hemos ocupado en más de una oportunidad. Muchos creen que por el hecho de poner el cuerpo por espacio de ocho o diez horas diarias, la empresa tiene la “obligación” de contenerlos y pagarles un salario respetable. Esta creencia lo único que hace es preservar, en el tiempo, el sentimiento de pertenencia al rebaño de los iguales.

De esta forma se genera un círculo vicioso en donde los empleados, insatisfechos por la “injusta postergación” de la cual se sienten víctimas de la empresa, poco y nada hacen por cambiar. Entonces, cuando se presentan los momentos de crisis, que son cada vez más frecuentes y crueles, gran parte de estos empleados-rebaño son despedidos porque para la empresa no les reporta ningún atributo de valor.

¿Cuál es la salida?

Pensar y trabajar en sentido contrario, es decir:

- Buscando el mejor camino para dosificar el conocimiento aplicado en lo laboral-profesional.

- Dotando de valor al conocimiento aplicado, con creatividad e innovación.

- Estando atento para anticiparlo, en el momento oportuno.

Todo ello es necesario o conveniente hacerlo de modo habitual y con absoluta naturalidad. Este “estilo” irá generando, entre los pares y el personal ejecutivo, una imagen de diferenciación que en el momento oportuno se traducirá, sin lugar a dudas, en un reconocimiento; de no serlo, no dude que se encuentra trabajando en una empresa promedio y mediocre. Por tanto, si así fuere, servirá de todos modos lo actuado para continuar con el logro de su visión en otra organización o actividad.

¡La sobredosis de información –con estrés incluido– es un contrasentido que hay que evitar. Para ello, el portador de Tu Marca Personal sabe y dispone de los elementos necesarios para dosificarla, adecuadamente, en cantidad y calidad!

José Podestá

Mentalidad de Empleado

04 diciembre 2011 ·

Con el advenimiento del desarrollo industrial y comercial las empresas han venido demandando, desde hace décadas, personal en relación de dependencia. Ese ha sido el modelo-paradigma por el cual hemos pasado la gran mayoría que, por necesidad o proyecto laboral, optamos por seguir. El resto lo constituyen los profesionales independientes y artesanos.

Durante mucho tiempo las empresas han sido muy buenas receptoras de la demanda laboral, salvo momentos de crisis propias o coyunturales que las obligaron a reducir transitoriamente la nómina, para luego volver a reconstruirla. Incluso hubo algunas que, siguiendo el modelo oriental, se comprometieron a dar “empleo de por vida”, algo que hoy nos parece más propio de la ciencia ficción.

Así como la globalización trajo algunos avances en la sociedad –y para muchas empresas representó la oportunidad de transformarse en global– también fue revirtiendo el tradicional posicionamiento de las compañías como receptoras masivas de la demanda laboral. Hoy la realidad se encarga de mostrarnos la escasez de la oferta, con los problemas sociales que ello implica.

A mediano y largo plazo nada indica que esta realidad se revierta. Si bien las empresas siempre han de necesitar empleados –especialmente habilidosos y con vocación de compartir ideas y conocimiento– ya no lo serán en cantidad como en el ayer. La tecnología disponible, la tercerización de funciones y la optimización de procesos van supliendo la nómina en las empresas.

Si esta es la señal del contexto, de nada sirve quedarse a la espera de algún llamado o convocatoria “milagrosa” que pueda generar la empresa. Y como de algo hay que vivir, es muy conveniente despertar a esta realidad y ponerse a pensar en otras opciones, incluso como eventual proveedor parcial o a tiempo completo de algún servicio a la empresa.

Por supuesto que hacerlo no es cosa sencilla porque la mentalidad de empleado la tenemos enquistada y grabada a fuego. Entonces, ¿qué hacer?

Pasos a seguir

Para no quedar paralizados y sin respuestas, es conveniente trabajar inicialmente en el reconocimiento de nuestra postura hacia la empresa, aunque hoy estemos en relación de dependencia, para modificarla. Para ello es conveniente pensar en algunas cosas clave, como ser:

- La empresa nada nos debe
Una vez que lo aceptemos dejaremos de creer que la empresa está en deuda con uno.

- Dedicar el tiempo a nuevos modelos de proyectos o negocios y menos al CV
El tiempo y energía que muchos pierden en el curriculum vitae debe ser transferido al pensamiento creativo e innovador, es decir, aplicado a la búsqueda de nuevas soluciones independientes en lo laboral.

- La comodidad es una trampa
Acceder a un ingreso variable en vez del sueldo mensual, aguinaldo, bonus y vacaciones pagas, no parece ser algo muy cómodo. Pero si la tendencia nos está alertando de que tal opción es hoy escasa y muy limitada, se necesitará hacer algo para cambiar.

- Adiós indemnización y jubilación
Muchos empleados sufren y hasta se enferman debido al mal clima laboral reinante en la empresa. Sin embargo, nada hacen por irse porque les duele dejar de cobrar en algún momento la indemnización.

Otros, en cambio, sacan pecho y resisten en el tiempo porque piensan que lo que está en juego es la jubilación. Lo que tal vez esta persona no sabe, o no quiere verlo, es que cuando llegue el momento de la jubilación ese ingreso seguramente no le alcanzará para cubrir los gastos de la primera quincena del mes.

- Saber jugarse
Quitarnos de la cabeza la mentalidad de empleado implica jugarse por un proyecto, con los pies en la tierra. El escritor italiano Umberto Eco llegó a resumir muy gráficamente lo que en la vida implica jugarse, de la siguiente manera: “Hay dos formas de hacer un safari: podés ir al África y contratar una excursión por el Kruger Park y correr el riesgo de que te piquen los mosquitos, soportar el calor, que los leones justo ese día no aparezcan y que los elefantes hayan migrado. O podés ir al The South Africa Family Vacation, en Disney, donde todos las tardes, a las cinco en punto, el elefante de plástico aparece y tira un chorro de agua justo después de que pasaste con el barquito”.

¡Al portador de Tu Marca Personal los mosquitos lo han picado en más de una oportunidad. Gracias a ello está inmune y sigue avanzando por más!

José Podestá

Indiferencia y Despreocupación

27 noviembre 2011 ·

A veces el tener una posición económica acomodada no es negocio para la nueva generación que está llamada a ser, en varios frentes, agente de cambio y generadora de nuevos paradigmas. Seguramente que algunos lo harán, pero en una cantidad reducida y tal vez insuficiente.

Algunos ejemplos

¿Qué se observa en la gran mayoría de los estudiantes en las carreras de grado o tecnicaturas? Que el estudio, a diferencia de lo que se daba en el ayer, no ocupa en los jóvenes un lugar prioritario. Básicamente, se encuentra subvaluado dentro de la escala de sus preferencias, restándole muy poca atención. Tal vez, intuyan que el estudio no es una salida válida para el éxito, ya que a diario ven cómo distintas celebridades son noticia y portadoras de bienestar económico, no justamente por haber accedido previamente a un título universitario. Por supuesto que siempre hay alguna excepción también en estos casos.

El poco tiempo que el alumno hoy le destina al estudio y a la lectura, incluso en los temas centrales de la sociedad, lo va alejando de la realidad de la cual terminará luego siendo un mero espectador o demandante en función de su conveniencia para lo meramente personal, social y recreativo.

Durante la clase el interés por el tema del día es algo relativo y muchas veces intrascendente a sus motivaciones; por supuesto que hay docentes que también hacen lo suyo para que ello ocurra. Lo importante es estar pendientes y atentos a las señales del celular para responder, siempre al instante, a los mensajes. Total para el parcial o el final hay tiempo de sobra y llegado el momento, sólo bastará con leer “algo” apenas unos días previos para aprobar la materia. Lo importante, no está en el saber ni en la calificación sino en el “zafar”.

En lo laboral el panorama tampoco es muy diferente. Cuando un nativo digital se presenta a una entrevista, queda sorprendido de la cantidad de horas diarias que deberá destinarle al trabajo versus el bajo sueldo asignado, a pesar de contar con “estudios universitarios”. Tampoco le seduce el tener que estar bajo el control de “un jefe”. Tiempo atrás leí en una entrevista la sorpresa de una reclutadora cuando en la búsqueda un joven le preguntó, antes que nada, cuántos días iba a tener de vacaciones y si podía ir al gimnasio durante el horario de trabajo.

¡Qué oportunidad!

Que la mayoría hoy transite por este estadio actitudinal no significa, en absoluto, que todo esté perdido. Si uno indaga, por ejemplo, la desmotivación ante el estudio, seguramente se descubrirá que muchos planes de estudio –incluso universidades– no forman a los profesionales para poder enfrentar con buenos recursos a las demandas del contexto y de la nueva economía. En cambio siguen ancladas en el discurso académico del ayer, que poco y nada los forma y prepara para el hoy.

Distinta es la situación de otras instituciones que hacen culto de la excelencia académica y de calidad, no sólo en lo teórico, y a la que acceden los jóvenes que sí están interesados en dotarse de recursos que luego les permitan capitalizar las oportunidades y ser los gestores del cambio que los tiempos demandan.

Estos ejemplos, más allá de ser parte de la realidad, sirven para señalarnos que la indiferencia y la falta de compromiso en lo que uno está llamado a ser, o la menos siente que es su misión, no es “negocio” para nadie. Para el portador de tal convicción, será la antesala de sucesivos fracasos y frustraciones, salvo que en un momento determinado asuma la convicción de cambiar. Y para aquellos que tienen en claro su visión y vienen transitando las distintas etapas que la harán realidad, saben muy bien que ese esfuerzo tendrá una doble compensación:

a. En lo personal, llegarán a ocupar un lugar destacado en el ámbito en que se desarrollen, por la calidad-estilo y habilidades que caracterizará su trabajo.

b. En la sociedad-comunidad a la que pertenecen, también se beneficiarán por la actitud socialmente responsable con la que ya hoy sienten que deberán asumir sus actos.

¡La indiferencia y despreocupación que hoy caracteriza a la mayoría de los jóvenes es la antítesis de lo que deben hacer. Mientras tanto, los futuros portadores de Tu Marca Personal avanzan por el camino opuesto!

José Podestá

Desorientados y Desmotivados

20 noviembre 2011 ·

En el ámbito laboral y profesional es habitual ver dos segmentos actitudinal de personas: las que destilan pasión por lo que hacen y cómo lo hacen, y las que acompañan o secundan a estas personas o bien están allí por obra del destino o vaya uno a saber porqué. Mientras los primeros constituyen un pequeño grupo, los segundos son la gran mayoría. Y cuando uno evalúa la situación de la mayoría, se encuentra con la sorpresa que para nada tienen bien en claro cómo llegaron hasta allí ni tampoco vislumbran cuál será su futuro.

Esta división entre emprendedores-líderes y el resto no es nada nuevo. Pareciera ser que la naturaleza no es ni ha sido muy democrática que digamos al momento de asignar los talentos a los seres humanos. Sin embargo, también vemos casos de individuos que han nacido en hogares muy pobres pero que con trabajo, esfuerzo y constancia han logrado acceder a posiciones destacadas en la vida. Por tanto, ante ello uno se plantea interrogantes, como el clásico:

¿Por qué?

Si nos concentramos en el último ejemplo, podemos ver que a pesar de la adversidad el individuo que tiene en claro un propósito para darle un sentido a la vida, se pone en acción para alcanzarlo, más allá de los obstáculos, dificultades o postergaciones transitorias que debiera enfrentar. Sea por alta motivación, perseverancia o espíritu de superación, no dejará de avanzar hasta alcanzar la meta propuesta.

Si en paralelo pensamos en el grupo mayoritario que simplemente acompaña a los líderes o lo hacen porque de algo tienen que vivir, aunque en ello no demuestren convicción alguna, podemos llegar a inferir que a pesar del tiempo transcurrido no tienen muy en claro qué es lo que aspiran ser en la vida. Al desconocer su misión, el ser humano presenta una imagen de desorientación. Pero cuando uno indaga en profundidad a estas personas, muchas están literalmente conformes como están. Más aún, no les interesa sobresalir pero sí ser parte de una mayoría anónima y sin demasiadas pretensiones. Y por ello también merecen respeto.

Una realidad tranquilizadora

Así como una persona socialmente excluida o marginada lleva adelante un proyecto de superación y prosperidad, hemos señalado que también están aquellos que a pesar de tener casi todo no demuestran interés de trascendencia ni de mejora, por la sencilla razón de que no están motivadas para realizar esfuerzo o proyecto personal alguno.

Aquí bien vale la aplicación gráfica de la Ley de Pareto, en donde un 20 por ciento promedio de las personas son las que aspiran a conducir y liderar, mientras el 80 por ciento restante acompaña. Para nada ello significa, en el caso del grupo minoritario, calificarlos como seres superiores o excepcionales, salvo cuando alguno de ellos pudiera manifestarse como un genio en lo suyo; esto no es lo que aquí estamos tratando.

Lo que sí es evidente es que cada uno de nosotros somos personas que referimos a nuestra individualidad, motivo por el cual debemos aceptarnos, respetarnos y ayudarnos solidariamente. De esta forma, los que hoy puedan ser parte de la grey de los conformes con lo suyo, deberían ser tenidos en consideración y estima, especialmente aquellos que sabiendo de sus propias limitaciones manifiestan un interés de superación y están trabajando en ello.

¡Los portadores de Tu Marca Personal son parte privilegiada del 20 por ciento mencionado, motivo por el cual deberán estar más atentos para reconocer y estimular a los que también están dispuestos a trascender, sin tener en claro cómo!

José Podestá

Valores y Capacidades

13 noviembre 2011 ·

La presión del contexto ha venido invirtiendo, por razones de urgencias, la relación de este titular. Las empresas, en general, priorizan que el empleado tenga las capacidades básicas para desempeñarse satisfactoriamente en el puesto asignado. Y no está mal que así sea. Pero ello no es, en realidad, una condición necesaria y suficiente. ¿Por qué? Por dos razones básicas:

a. El empleado debe tener, en primer término, condiciones humanas –ética, actitud y valores– que permitan su integración en la cultura de la organización.

b. El empleado que no posea los conocimientos específicos que demanda el puesto, pero sí potencial de identificación con los valores de la organización, podrá suplantar el déficit y carencias de habilidades técnicas mediante la capacitación.

Mientras lo primero hace a la condición y calidad del individuo como persona, lo segundo es mucho más fácil de alcanzar mediante un programa de capacitación. La inversión que de esta fórmula realicen las empresas para privilegiar los resultados, terminan en la práctica teniendo serios problemas de vínculos, relaciones y productividad. Y lo que es peor, estas carencias luego no se mejoran o superan con la capacitación.

Cuando uno analiza el éxito que alcanzaron las empresas innovadoras, rentables y exitosas en sus respectivos mercados, descubre que ello se debe a la calidad del personal en materia de valores y honestidad. Más aún, estas empresas no aceptan es su organización a las personas que no están dispuestas a compartir los valores, por tratarse de los principios guía atemporales que la sustentan en el tiempo.

En un mundo material centrado hoy en la ganancia rápida y/o a cualquier precio, pareciera que lo mencionado precedentemente no debiera ser importante ni digno de consideración. Sin embargo, no es así para todos aquellos que hacen prevalecer su cultura diferencial.

Tal vez el mayor flagelo que impacta y reina en el mundo, además de la droga, es la corrupción. Combatirla no es fácil por una actitud bastante enquistada en el inconsciente colectivo, y que radica en que la mayoría de los seres humanos se ven, a sí mismos, como muy honestos mientras consideran que la corrupción tiene que ver con otra gente. Sin embargo, recientes investigaciones muestran que cualquiera puede ser corrupto ante la más mínima oferta.

Un estudio del Swiss Federal Institute of Tecnology, de Lausana, señala que si el ser humano es honesto la mayor parte del tiempo, puede sólo deberse a la falta de oportunidad para trasgredir o engañar.

Tradicionalmente se vincula la corrupción con lo público y político, debido a la falta de controles. Pero bien sabemos que también está presente en las organizaciones, a pesar de los controles disponibles. Más aún, la corrupción es fuertemente cultural y refleja las normas sociales propias del país.

Pero ello no significa que todo esté perdido. Hay individuos que son nada susceptibles a las influencias culturales de la corrupción. Por tanto, son los demandados y tenidos en cuenta, cada vez más, en aquellas empresas que privilegian los valores.

¡Tu Marca Personal no garantiza la honorabilidad de su portador, motivo por el cual necesitará validar y demostrar con su trabajo y compromiso que no es parte del rebaño de individuos carentes de valores, integridad y moralidad!

José Podestá

Branding Personal

06 noviembre 2011 ·

El branding no refiere a una bebida. Tiene que ver con la tarea básica y central que toda empresa necesita priorizar en el contexto sobreofertado en que hoy se encuentra. Es decir, con la estrategia de marca.

Si ello es lo que ocupa y desvela a las compañías, más allá de su tamaño, tampoco deja de ser una prioridad para el individuo. ¿Por qué? Porque hasta las crisis recurrentes, sean globales o locales, nos dicen que la oferta laboral se restringe al tiempo que una legión de postulantes y profesionales pretende ingresar en el mercado laboral.

¿Qué conviene hacer?

Algunas acciones enunciativas, serían:

- Tener pleno conocimiento de esta realidad.
- Analizar en qué medida afectará, se trate del corto o mediano plazo.
- Tener en claro un proyecto personal y ponerse a trabajar en su gestión.
- Avanzar en cada una de las actividades conducentes con el objetivo principal.

Cada uno de estos pasos se interrelacionan entre sí. Alcanzar el objetivo-visión plasmada en el proyecto personal demandará tiempo y esfuerzo, pero ello no implica que se lo asuma como una carga. Más bien, es un trabajo estimulante porque tiende al logro de un futuro más viable y focalizado en una mejora concreta.

Sabiendo que el entorno del empleo en relación de dependencia va camino de una reducción continua, el proyecto personal debería poner incluso énfasis en una actividad laboral-profesional autónoma. Independientemente de ser una buena opción para acotar el riesgo de incertidumbre, de lo que se trata es poder minimizar imprevistos reiterados que luego suelen terminar impactando, negativamente, en el humor y en las finanzas personales.

¿Cómo hacerlo?

Tomando consciencia que el trabajar en un proyecto personal es una tarea, a veces compleja y ardua, pero que bien vale la pena realizarla. En este caminar habrá algunos que lo pueden hacer solos y otros que, tal vez, necesiten de un soporte de orientación, asistencia o estímulo. Pero cualquiera sea la situación en la que se encuentre cada uno, lo importante es ponerse en acción.

Una vez descubierta las potencialidades y carencias que se tienen y acordado cómo se las irán revirtiendo, se llega a la instancia central del proyecto: la visión. La misma, consiste en visualizar, con los pies en la tierra, qué se aspira alcanzar en el mediano o largo plazo en lo laboral-profesional, y cuándo.

A partir de la visión se estará en condiciones de diseñar la estrategia que la haga viable y el plan de acción. De allí en más, se necesitará convicción y voluntad férrea para no claudicar en el intento. Pero reitero, para nada ello significa incurrir en sacrificios extremos pero sí estar muy atentos a los imprevistos que se vayan dando sobre la marcha, para prevenirlos, neutralizarlos o superarlos.

¡El branding demanda tiempo, pero los resultados luego quedan a la vista de todos. A Tu Marca Personal le sucede lo mismo, pero con la diferencia de constituirse en la mejor “huella” que califica a su portador y ser el mejor premio a la calidad, el estilo de hacer las cosas y la pasión que lo identifica!

José Podestá

El Campo Como Escuela

30 octubre 2011 ·

¿A quién no le gusta el confort y el no tener que ocuparse de asuntos no gratificantes? Incluso, mencionar reiteradamente que “todo está bien”, aunque internamente sintamos que realmente no es así. Entonces, y sin darnos cuenta, nos vamos refugiando en nuestra individualidad como una forma de minimizar o evitar todo tipo de desgaste urbano.

Cuando uno considera al obstáculo que se le presenta en la vida como algo molesto que hay que evitar o saltear, se va perdiendo la capacidad-habilidad de respuesta y solución espontánea. Pensarlo o vivirlo como una carga, aunque ésta sea improductiva, es ir bajando nuestra predisposición-actitud hacia la superación continua.

Lo opuesto a este tipo de comportamiento se da, por ejemplo, en el campo o zona rural. Allí el ser humano tiene la oportunidad de interactuar con la naturaleza y aceptar sus códigos, lo que implica anticiparse o reaccionar frente a todo tipo de imprevistos. Por cierto, es un segundo trabajo al que se le suma el específicamente laboral. Sin embargo, esta multiplicidad va dotando a la persona de autoconfianza y autonomía plenas, porque los imprevistos pueden o suelen estar a la orden del día. Su resolución exige coraje, optimismo y autoconfianza, elementos que hoy tampoco pueden estar ausentes dentro del repertorio de destrezas que se le demanda a un directivo o líder.

Enseñanzas emergentes

Así como el confort propicia, sin darnos cuenta, letargo, pereza y hasta carencia de ideas, la vivencia rural estimula no sólo la adrenalina sino también el deber ser tenaz y creativo hasta que la solución de los problemas-imprevistos se restauren.

Cuando uno tiene la oportunidad de haber capitalizado estas vivencias desde pequeño, con el pasar de los años vamos tomando consciencia que muchas veces, ante lo que aparenta ser un serio problema, no lo es tan así. Tal vez la natural predisposición de tener que estar atento frente a impensados sucesos de la naturaleza, hace que afloren espontáneamente los reflejos adecuados para revertirlos de inmediato y con firmeza. Este training no se logra desarrollar, lamentablemente, en el contexto urbano.

La oportunidad de la marca

Cuando se tiene un plan personal, la actitud es otra. El mismo esfuerzo de lo que implica persuadir, demostrar y hacer muy bien las cosas, aunque se trate de contextos en donde predominan más trabas que soluciones para el emprendedor, motivan a no claudicar en el intento. La sana superación va así neutralizando lo que para otros son problemas y macerando un estilo de anticipación-reacción inmediata ante aquello que pudiera atentar o poner en riesgo el proyecto personal.

Alguno de ustedes tal vez podría llegar a pensar o tener conocimiento de individuos que, a pesar de estar transitando por el desarrollo de su identidad laboral-profesional, no encuadran literalmente en lo expresado anteriormente. Más aún, hasta se jactan de lograr todo al mínimo esfuerzo. Ello no es ninguna novedad, porque tradicionalmente estos seres siempre han convivido entre los que más hacen y se sabe de sus limitaciones.

Hoy la buena noticia es que esas personas lentamente van perdiendo identidad y legitimidad ante empresas que necesitan, más que nunca, de empleados comprometidos no sólo con la cultura y los valores de la organización sino con la generación de conocimientos y nuevas ideas creativas.

¡La ventaja competitiva es una de las derivadas de Tu Marca Personal, que habla de los atributos diferenciales del portador y también de su tenacidad y autonomía puestas al servicio del diario hacer!

José Podestá

El Doble Mensaje

23 octubre 2011 ·

Seguramente que a nadie le gusta ser sorprendido en su buena fe, sea en la vida de relación o en el ámbito laboral-profesional. Si ello es así, también es muy importante que uno mismo lo tenga bien en cuenta cuando ocupe o tenga una posición ejecutiva dentro de la organización, porque tal vez y sin darnos cuenta –o sí– terminamos en algún momento diciendo algo a los empleados que rima con el doble discurso.

Esta carencia, que también se suma a otras propias del ser humano, termina por producir reacciones y percepciones muy negativas en términos de imagen. Al respecto, sabemos muy bien que cuando alguien se forma una opinión negativa del otro, prácticamente es muy difícil que la cambie.

Por lo general el ser humano suele cometer este tipo de torpezas, sin medir en ese momento las consecuencias. Con el tiempo se termina cosechando una mala reputación, aunque en la tarea laboral-profesional predominen las aptitudes sobresalientes. Todos tenemos muy presente la expresión: “fulano es buena persona, pero…”

Alguno de ustedes podrá pensar que, en la práctica, el mundo hoy funciona así. Más aún, muchas veces se observa que en algunas organizaciones este tipo de proceder –tal vez porque va en defensa de los “intereses de la empresa”– no sólo es aceptado sino también hasta mejor remunerado.

¿Qué hacer al respecto?

En función de una saludable convivencia y relación se debe valorar la palabra, incluso por respeto al otro. El hecho que hoy uno perciba que hasta la palabra está devaluada, no significa que ello esté bien. En realidad, ello es reflejo de la denigración de los valores vigentes, sumado al excesivo individualismo y mercantilismo imperantes.

Entonces, hacerlo porque en caso contrario uno puede llegar a quedarse afuera del sistema, se torna en un acto irresponsable y hasta con repercusiones ético-moral a nivel inconsciente.

Ser franco y directo también puede ocasionar en el otro un hecho que le produzca molestia, malhumor o rencor. Sin embargo, por estar en este caso anclado en una rectitud de proceder, con el tiempo la persona damnificada terminará seguramente reconociendo que se trató de algo justo. El líder, algunas veces, decide cosas que no gustan a algunos pero que luego son aceptadas porque apuntan a una mejora-solución general.

Vemos pues que a pesar de generar una situación molesta en el otro, tal como sucede cuando nos sorprendemos del doble mensaje, es este caso para nada se reciente la imagen del emisor.

Para quien se encuentra ya focalizado en el desarrollo del Personal Branding, la rectitud de proceder no es un dato menor. Hoy estamos inmersos en la cultura del compartir- mostrar y conversar, incluso de cosas íntimas, sea en las redes sociales o en los grupos de relación. Por tanto, es fundamental mantener una coherencia entre el decir y el hacer, a los efectos de no quedar luego expuestos ante una situación embarazosa y de connotaciones negativas para el plan de carrera laboral-profesional que tanto trabajo demanda.

¡Aunque el recto proceder y el decir no sean atributos de valor para muchos, su práctica habla muy bien del portador de Tu Marca Personal. Incluso, hasta “marca” como una ventaja competitiva!

José Podestá

Las Enseñanzas de Steve

16 octubre 2011 ·

Cuando un ser humano aportó a lo largo de su vida innovaciones de valor, cualquiera haya sido su misión, al partir de este mundo suele dejar una sensación de vacío, estima y admiración. Lo primero que se nos cruza por la cabeza es que uno jamás podrá realizar algo similar. Y es natural que así sea, por la sencilla razón de que somos individuos únicos e irrepetibles, motivo por el cual cada uno de nosotros está llamado a ser otro contribuyente en la diversidad.

Steve Jobs ya no está entre nosotros. No es mi intención hacer una semblanza de sus aportes pero sí considero que vale la pena detenernos y meditar en lo que a dado en llamarse los “10 Mandamientos de Steve Jobs”. ¿Para qué? Para que cada uno saque ideas y conclusiones que pueda servirle en el diseño de su proyecto personal.

1. “Apunta a lo perfecto, preocúpate en los detalles”

Esto es bien oriental. Sirve para tomarnos las cosas con la seriedad e importancia que tienen. Ser desprolijo o descuidado en los pequeños detalles puede llegar a generar consecuencias imprevistas y hasta malos momentos en una entrevista, presentación o reunión.

2. “Conéctate con los expertos”

Es un antídoto contra la mediocridad imperante, a todo nivel. ¿Con quién deseas espejarte: con tu jefe tal vez irresponsable o con el director de área que demuestra condiciones ético-morales y de gestión sobresalientes?

3. “No tengas piedad. Se implacable incluso con tus propios proyectos”

Por lo general, nos transformamos en sumisos frente a un superior por el poder formal que ejerce. Y quizás, hasta por temor reverencial, terminamos haciendo lo que se nos pide. En cambio, en lo personal muchas veces nos tomamos las cosas a la ligera, incluso en asuntos importantes como lo es el desarrollo y posicionamiento de nuestro trabajo-profesión.

4. “Huye de los Focus Groups: No saben lo que quieren, hasta que se los muestras”

Esto tiene que ver más con la investigación y evaluación de las nuevas oportunidades de negocios. Sin embargo lo podemos trasladar a lo personal, recordando otra de las máximas de Steve en donde nos instaba a no perder el tiempo intentando “copiar la vida o los pensamientos ajenos”. Ya sabemos que a las empresas les encanta tener clones dóciles y con costo-salario acotado, para luego decirnos qué es lo mejor para la organización.

5. “Nunca pares de estudiar y aprender”

Es lo que uno debe tener en cuenta para no ser parte del rebaño. La ventaja competitiva, en lo personal, hoy pasa por la inteligencia y el conocimiento actualizado y aplicado.

6. “Guarda tus secretos”

La tendencia actual es compartir públicamente todo, hasta las cosas íntimas. ¿Realmente crees que serás tenido en cuenta por ello el día que seas elegido por tu empleador objetivo?

7. “Simplifica”

El ser humano se caracteriza por complicar hasta lo obvio. No hay que ser un genio para darse cuenta de ello y evitarlo.

8. “Que tus equipos sean reducidos”

Ello hace a la eficiencia, productividad –incluso de ideas– y a la excelencia. Para nada implica tener que aislarse o hacer culto de lo antisocial.

9. “Motiva más con recompensas que con castigos”

Es propio de un líder y del ser justo con los demás. Hace al perfil de una buena persona.

10. “Lleva tus prototipos al extremo”

Seguramente que el proyecto personal no funcionará de entrada o como uno se lo imaginó, a pesar de los recaudos tomados. Pero si el foco es el correcto, el esfuerzo bien vale la pena. Hasta Steve Jobs puso toda su energía en ello, y lo logró.

¡Para un desarrollador de Tu Marca Personal, los innovadores y los líderes con talento siempre son un factor de motivación e iluminación, pero no de imitación!

José Podestá

Frustración y Costos

09 octubre 2011 ·

En el ámbito laboral y profesional muchas personas padecen de estrés debido a las tensiones, presiones e imprevistos que diariamente no se logran gestionar de un modo correcto. Esto tiene que ver con el denominado estrés negativo, fruto de haber superado la persona los límites normales de exigencia y saturación al cuerpo y mente. No obstante, también es conveniente tener en cuenta que un acotado nivel de estrés es necesario, pues motiva a estar atentos y a la acción.

Pero cuando en una organización o profesión existen personas con signos de pérdida de interés en su tarea, indeferencia o llamativo nivel de irresponsabilidad, estamos ante el denominado síndrome de desgaste profesional. El mismo también se lo conoce como burn out y fue descripto, en el año 1974, por el psiquiatra Herbert Freudenberger como: “Fallar, gastarse, sentirse usado, fracasado, agotado o exhausto debido a excesivas demandas de energía, fuerza o recursos personales”.

En el ámbito laboral-profesional el burn out se produce generalmente por sobrecarga de trabajo, alta competencia entre pares, presiones económicas-financieras o escasa satisfacción laboral. El problema radica en que el organismo humano termina por habituarse a sentirse mal y afectando la salud mental y física de quienes lo padecen. Algunos estudios señalan que el 30% de la población lo padece en forma grave y sube al 50% en los casos más leves.

El problema del burn out es que la persona puede transmitirlo anímicamente a sus compañeros de trabajo. Así, tal como si fuera un virus, termina afectando la productividad, generando accidentes, errores, ausentismo, etc.

La generación del costo que surge de esta enfermedad afecta a ambas partes. Para el empleado-profesional, es la antesala a la frustración, especialmente cuando éste tenía previsto algún plan o proyecto personal. Para la empresa, no sólo incurre en mayores costos sino que el impacto-contagio termina dándose en la organización, alterando el clima laboral.

Cómo nos damos cuenta

Porque la persona manifiesta un gran cambio en sus hábitos –alimentación, recreación, descanso– y de actitud hacia el trabajo, es decir: desmotivación, falta de compromiso, escaso o nulo deseo de involucramiento. En una palabra, el trabajo pasa a ser una carga con connotaciones negativas.

Como también ocurre con otros síntomas, el afectado no busca ayuda o solución. Por lo general se muestra hiperactivo, aumentando su cansancio y frustración, lo que conlleva a mostrarse irritable y violento en los ámbitos en donde se nueve, incluido el familiar.

El punto de máxima se da cuando esta persona se retira de toda actividad que no sea la laboral-profesional, resignando el entorno familiar-social e ingresando a un estadio de autorreclusión.

Los excesos restan

El burn out no debería ser soslayado por el individuo que viene trabajando fuerte para alcanzar su objetivo de posicionamiento laboral-profesional. Muchas veces, sin darnos cuenta, caemos en nuestra propia trampa de hiperactividad o cometiendo errores tácticos, como ser:

- No descansar adecuadamente.
- No respetar los horarios de comidas o frecuentar los desayunos y/o almuerzos de trabajo.
- No darse tiempo para las gratificaciones.
- Practicar deportes extremos o actividad física de competición, algo que desde hace milenios los orientales nos vienen advirtiendo no hacer.
- Trabajar más de la cuenta, como una autoimposición y creencia del deber ser, “para que me tengan en cuenta”.

De lo que se trata, de lo verdaderamente razonable e inteligente, es saber que uno mismo es el artífice de su plan o proyecto personal. Muchas veces se piensa que acelerando los pasos se podrá llegar antes, pero la realidad se encarga habitualmente de señalar que los tiempos de decisión del mercado objetivo suelen ser más lentos y hasta erráticos.

¡Tu Marca Personal es estratégicamente en sí misma una innovación en el valor que el portador supo construir con trabajo y habilidad. Sin embargo, sólo en tiempo y forma será reconocida por el destinatario!

José Podestá

La Empresa, Casa de Estudio

02 octubre 2011 ·

El cambio también impacta en lo académico, a tal punto que las universidades no logran adecuarse a la realidad, obligando a las empresas a capacitar a sus empleados puertas adentro.

Las compañías que trabajan con tecnología y sofisticados procesos de fabricación, han sido las pioneras en reconvertir o desarrollar el área de capacitación y desarrollo para formar o certificar trabajadores para no retrasar sus proyectos.

También existe el caso de empresas, como Google, que debió crear la unidad de servicio Google Academy con el objetivo de brindar un programa gratuito de capacitación de tres meses, en publicidad online, para aquellas empresas que necesitan aprender y trabajar en la plataforma publicitaria Google AdWords.

Este ejemplo también es interesante porque a pesar de la existencia de la carrera de grado en Publicidad, los programas de estudio no brindan al alumno la posibilidad de poder egresar con un nivel de conocimientos actualizados y acorde con la demanda del contexto. Por supuesto que hoy esta carencia se proyecta también al resto de las profesiones que siguen privilegiando lo académico –cosa que no está en cuestión– pero sin darse cuenta de los nuevos conocimientos que hoy pasan a ser la materia prima para poder acceder y satisfacer a las nuevas demandas.

Otro ejemplo es Marketing. Esta carrera no suele poner el foco en el área comercial-ventas. De allí que la mayoría de las empresas de consumo, que necesitan contar con ejecutivos seniors en ventas-negocios, se ven obligadas a capacitar internamente al noventa por ciento del total del sector comercial, en múltiples temas: técnicas de ventas, negociación, presentaciones, PNL, sales team management –para líderes de equipos– informática, etc. A ello deben sumar, en función de los canales de distribución, lo específico que demanda el Trade Marketing.

Capacitación continua

También es justo reconocer que hay falencias del lado de los nuevos egresados. La mayoría cree que por haber culminado una carrera de grado o posgrado ya es suficiente, sin percatarse que la velocidad del cambio también va licuando lo aprendido hasta no hace mucho tiempo.

Si se tiene en cuenta que el conocimiento pasó a ser el insumo de mayor valor que hoy las empresas necesitan para ser competitivas y sustentables, está en uno tomar este requerimiento con la importancia que a futuro tiene para el desarrollo laboral-profesional. Este condicionante es un factor clave, especialmente para los que vienen trabajando en el desarrollo del Personal Branding.

Así como Tu Marca Personal es consecuencia del reconocimiento que hacen los pares o el mercado objetivo, más allá de las habilidades-talentos que uno posea, es importante estar al día con las tendencias que se perfilan como nuevos inductores de valor en la actividad en la que se esté desempeñando. La empresa hoy demanda la implementación y gestión de cambios innovadores que sólo podrán ser oportunos y convenientes en función de la aplicación del conocimiento.

Esto supone que el aprendizaje, derivado de los nuevos conocimientos, prácticas e innovación, sea parte del expertise que se debe poner diariamente en acción, cualquiera sea el puesto o responsabilidad laboral-profesional. A nadie le gustaría ser atendido y diagnosticado por un médico que en su especialidad no domine los últimos adelantos. Entonces, ¿por qué ello no es válido para el resto de las actividades que también hoy están expuestas al cambio continuo?

Qué hacer para no verse sorprendido

El volumen de información crece exponencialmente y nuestro conocimiento, además de volverse obsoleto, sufre un proceso inflacionario que es fruto de la licuación derivada del cambio permanente. Por tanto, la única ventaja competitiva que podemos tener y ofrecer en este contexto es la habilidad de aprender más, y rápidamente.

Entonces a no extrañarse, de ahora en más, cuando ante una búsqueda nos sorprendan con la siguiente pregunta: “Dígame cuánto sabe y le diremos cuánto usted vale para esta compañía”.

¡Ser portador de Tu Marca Personal califica para acceder a nuevos y mejores proyectos-desafíos, siempre y cuando dispongamos del conocimiento que nos permita generar más opciones para la resolución de aquello que, al principio, les parece imposible a sus pares!

José Podestá

El Plan de Carrera

25 septiembre 2011 ·

Muchos suelen sentirse conformes y contenidos cuando la empresa es la que se encarga de diseñar el plan de carrera dentro de la organización. Aquellos que tienen aspiraciones de trabajar para una empresa global, por la eventual posibilidad de poder migrar hacia el exterior, hasta lo sienten como un atractivo de consideración.

Asumir tal comportamiento y actitud ha sido y es coherente con el sentimiento de dependencia directa con la empresa. El término-expresión en relación de dependencia implica un encuadre de vínculo-relación y entrega hacia la organización Tal vez la expresión legal del “deber ser” es lo que mejor ilustra tal percepción.

En la actualidad el plan de carrera, en su práctica, dejó atrás la rigidez que lo caracterizada. Básicamente respondía a un cronograma fijo de cursos de capacitación que, en la práctica, los menos comprometidos en responsabilidad o carga horaria eran los únicos que lo podían capitalizar. En los nuevos planes aparece la figura del “líder de competencias” que tiene el rol de posibilitar al empleado, desde la inducción, ser el referente tutor que lo acompañará en su progreso laboral-profesional.

La falta de sincronización existente entre las capacidades del postulante y lo que realmente necesitan las empresas, ha dado origen a las academias de capacitación. Su misión es la de reclutar personal y capacitarlos en forma masiva. Se trata de cursos de aproximadamente dos meses de duración, sobre aspectos básicos y clave del negocio de una industria determinada, y está dirigido a estudiantes universitarios que buscan alguna especialización que les sirva para luego poder comenzar un plan de carrera dentro de la empresa.

Los postulantes que mejor califiquen en evaluación y desempeño, obtienen así una oferta laboral para incorporarse a la empresa. Se trata, por tanto, de una inversión previa que realiza el interesado y que tiene para la compañía el beneficio de disponer de un perfil acorde con las habilidades que demanda el puesto y el sector.

El rol del nuevo plan de desarrollo, en términos de su flexibilidad y objetivos, permite que sea bastante funcional para el plan de carrera del empleado. Ello se debe a que las partes, empleado-empresa, acuerdan sobre el objetivo perseguido, el tiempo previsto y los compromisos que ambos se comprometen para hacer viable la futura promoción.

Las dos actitudes

Existen dos actitudes frente a los beneficios que una compañía tiene hacia sus empleados:

a. Que se lo considere como una responsabilidad-obligación de la empresa.
Al respecto, esta actitud-percepción de demanda de algunos empleados termina por desvirtuar su finalidad. ¿Por qué? Porque se lo vive como algo que a la empresa le corresponde brindar. Desde ya que a los empleados promedio poco y nada les seduce este beneficio, salvo que existan evidencias de una posterior mejora salarial.

b. Que se lo capitalice como una verdadera oportunidad.
Los que así lo sienten suelen ser los empleaos más comprometidos y motivados con su proyecto personal-profesional. ¿Por qué? Porque saben que el beneficio que les está brindando la empresa muchas veces no sólo es funcional con su motivación “Yo SA” sino que también se presenta como una eventual oportunidad para anticipar la fecha y logro de su visión personal.

¿Quiénes son los ganadores?

Tanto la empresa como aquellos empleados que aspiran en el mediano y largo plazo hacer carrera en la organización.

Un individuo que viene trabajando en el desarrollo del Personal Branding no dejará de lado todo aquello que le sume valor a su propio proyecto. El capitalizar el plan de carrera de la empresa también le será muy útil para la empresa, durante todo el tiempo de permanencia del empleado. Si éste en algún momento decide migrar hacia un nuevo proyecto, no necesariamente implica una deslealtad hacia la empresa que invirtió y lo ayudó en su evolución. Ambos son los beneficiados, porque hasta podría llegar a ocurrir que tiempo más tarde la empresa encuentre en este ex empleado un referente de valor que lo pueda representar y complementar en un proyecto externo.

¡El plan de carrera, más allá del propio o el que la empresa decide implementar, es una propuesta de valor para el portador de Tu Marca Personal, sumado al beneficio que ambos luego han de capitalizar!

José Podestá

Talento y Valor

21 septiembre 2011 ·

Desde hace un tiempo y de modo creciente, se escucha que las empresas están preocupadas por no disponer del personal adecuado para dar respuesta a las demandas del contexto. El problema abarca a toda la organización, incluyendo al director o CEO; éstos hoy registran un alto nivel de rotación, incluyendo casos de despidos compulsivos como lo fue el de Carol Bartz, ex presidenta ejecutiva de Yahoo!

¿En dónde está el problema?

Posiblemente el problema sea de origen estructural. Si nos preguntamos a nosotros mismos por qué trabajamos, lo primero y lógico que se nos viene a la cabeza es para poder afrontar los gastos diarios, sean propios o del núcleo familiar. Superada esta instancia, el nivel de necesidad-deseo comienza a sofisticarse y empezamos a poner el foco en los aspectos materiales de mejora futura y crecimiento en la empresa.

Es decir que encaramos el trabajo a partir de nuestra propia necesidad de subsistencia y pensamos que la empresa tiene, en tal sentido, un “deber” de correspondencia. En algunos casos, incluidos los ejecutivos, está tan arraigada esta creencia que luego hasta terminan utilizando a la empresa en su propio beneficio.

Del otro lado, la empresa tiene una percepción y posición tomada acerca del empleado. Recurre al mismo por la imperiosa necesidad de poder plasmar su misión-visión y con ello aspirar a un desarrollo sustentable en el tiempo. Es decir, brinda trabajo porque de otra manera no podría concretar el emprendimiento, por más disponibilidad de capital que tuviera. Mientras algunos empresarios creen que el empleado en un “recurso” que impacta en el costo del negocio, motivo por el cual hay que minimizarlo a su máxima expresión, otros sostienen lo contrario: es la inversión que necesitan hacer para poder hoy ser competitivos, en un mercado de productos-servicios cada vez más comoditizado.

¿En dónde está el valor?

En el empleado, sin lugar a dudas. A partir de su motivación puesta en práctica en un proyecto que demanda de sus habilidades, destrezas y conocimientos, el empleado percibe que el trabajo no solo tiene un sentido en su vida sino que también lo predispone satisfactoriamente en su vida familiar, profesional y social. Aquí no me estoy refiriendo a los empleados calificados o de dirección, sino a todos en general.

Desmitificando el talento

El talento al que nos referimos aquí no es el estereotipado, es decir, aquel que califica a los súper héroes o genios de la humanidad. Se trata, en realidad, de alguna habilidad que seguramente todos disponemos y muchas veces no tenemos consciencia de ello, por la sencilla razón de no prestarle atención alguna o por tenerlo adormecido.

Los empresarios son exitosos gracias a que sus empleados tienen las condiciones y habilidades necesarias para contribuir al logro de la estrategia. Se podrá ser un excelente CEO o ejecutivo de línea, pero si en la práctica la empresa carece del personal idóneo, hábil, comprometido y que aporte valor en sus tareas, no podrá concretar la visión de la empresa ni la propia.

¡Tu Marca Personal es un diferencial que refiere a una persona con talento y valor. Gracias a ello, se termina alcanzando el reconocimiento de los pares y de la sociedad, a pesar de tratarse de un ser normal!

José Podestá

El Obsoleto CV

18 septiembre 2011 ·

Durante décadas el CV ha sido una herramienta-recurso muy funcional para la búsqueda laboral-profesional, a todo nivel. En el mismo uno plasmaba una breve semblanza de la biografía, con el objetivo de constituirse en una eficaz “carta de presentación” ante el destinatario. Quizás muchos de ustedes hasta hayan leído algún libro o asistido a una capacitación para saber cuál debía ser el mejor formato y estilo del CV.

En épocas de bonanza y contextos calmos, que ya no son comunes en la actualidad, las empresas al principio y las selectoras de personal después, han sido las grandes receptoras del CV, el que luego era prolijamente clasificado y archivado en función de su relevancia, oportunidad y valor. Luego la tecnología posibilitó migrarlo a la Web, cambiando tanto de formato como de contenido, pero funcional al interés del reclutador.

¿Qué es el CV?

Un estupendo recurso, del lado de la oferta, para formatear, tipificar y uniformar a los postulantes de acuerdo con la descripción del puesto de trabajo. Así, un gerente, empleado o cadete deben tener un perfil determinado, el que será remunerado de acuerdo con la media establecida. Aquí hay otro beneficio para el empleador: tener acotado el costo de “la mano de obra”.

Durante décadas el postulante debió adaptarse a este requerimiento y aceptarlo como tal. El resultado de ello no es muy difícil de imaginar: se trabajaba para dar respuesta-solución a las demandas “tipificadas” del puesto de trabajo, percibiendo por ello un salario “promedio” más algún beneficio social.

Esta mecánica, que funcionó muy bien en el ayer y hasta en piloto automático, hoy es inconducente y carente de valor. ¿Por qué? Porque las organizaciones ya no pueden ser sustentables dependiendo de empleados promedios. Al contrario, se necesita que sean anticipadores del cambio, generen aporte de sus conocimientos, propuestas de innovación en el valor y actúen de modo autónomo, tanto en el pensar como en el hacer. Y ninguna de estas habilidades se las encontrará en un CV estandarizado y promedio.

El CV está muerto. Viva el CV

A pesar de no brindar la respuesta-solución adecuada al contexto, la mayoría de las empresas y selectoras siguen empleando el CV, lo que demuestra tres cosas:

a. La practicidad de tener tipificado y encasillado al personal en un puesto de trabajo, con un costo laboral acotado.

b. Desconocen el rol que hoy tiene el empleado para que la empresa pueda, por lo menos, mantenerse dentro de los registros históricos de rentabilidad y desarrollo.

c. Piensan y hasta creen que el empleado en un “recurso” al que deberán “extraerle” toda la energía necesaria que justifique su contratación y “costo”.

A pesar de la lógica que para muchos tienen tales consideraciones, hoy para nada son conducentes para lograr una permanencia rentable en el mercado. Pero a pesar de ello, el CV sigue siendo “el rey”, por tratarse de una herramienta “filtro” que para el caso de las empresas-promedio que brindan productos o servicios-promedio, les resulta útil para incorporar personas al más bajo costo posible. Y así, sin darse cuenta, están apostando a una pronta desaparición del mercado.

La otra realidad

Mientras las empresas-promedio luchan por mantenerse a flote en el océano rojo que ellas mismas han creado, porque están en riesgo y con escasa o nula rentabilidad, existen otras empresas que sí saben que la ventaja competitiva ya no proviene de sus productos o servicios –porque prácticamente en el mercado ya son todos iguales. Son las que se dieron cuenta que la clave está en el personal de calidad, es decir: inteligentes, motivados y creativos, pero que además desean aportar soluciones diarias en lo que hacen.

Estas empresas se ocupan de convocar al individuo talentoso, aunque se trate de un cadete, porque necesitan que la estrategia sea viable con el aporte de todos. Y para su convocatoria, el CV ya no sirve porque nada dice de los valores y habilidades que definen a la persona.

¡El portador de Tu Marca Personal tiene un futuro venturoso porque es el que está en la mejor posición para responder a las necesidades de la empresa. Y además, no necesita del CV porque quedó neutralizado por la conversación referencial que de su estilo de trabajo hacen y transmiten sus pares y conocidos!

José Podestá

Se Vienen los Robots

11 septiembre 2011 ·

Siempre hubo polémica acerca del rol que le cabe a una empresa como generadora de fuentes de trabajo. Algunos sostienen que ello debe ser así mientras que otros lo ven hasta como un “mal necesario”. Lo cierto es que si en el planeta tierra todos evitaran tener empleados, seguramente que tampoco habría empresas sustentables por no disponer de un mercado que justifique su misión y razón de ser.

Es preocupante lo que está haciendo al respecto la empresa taiwanesa Foxconn, productora del iPhone de Apple. En la actualidad cuenta con 10,000 robots pero tiene previsto sumar 290,000 en 2012 y poder así llegar al 2014 al millón de robots para suplantar a una cantidad equivalente de empleados. ¿Cuál es el racional de tal decisión? El argumento ya trillado de reducir gastos, mejorar la eficiencia y eliminar los trabajos simples y de rutina.

Sin embargo, el refrán popular “quien siembra, cosecha” es lo que la empresa Foxconn viene mostrando a la comunidad, a partir de la ola de suicidios de sus empelados en los últimos meses. Evidentemente, estas lamentables señales parecen ser que para algunos empresarios no son relevantes ni dignas de consideración.

Creer que la gente debe existir para consumir, especialmente mis productos-servicios, es propio de seres doblemente irresponsables. La economía no cierra, al menos hasta ahora, sólo con la variable consumo.

Sin dudas que Foxconn es un caso-ejemplo extremo. Nadie discute que la robótica es un recurso complementario que hace a la eficiencia y la productividad, además de ser muy conveniente en actividades de riesgo o extrema dificultad. Lo malo es cuando se la termina asumiendo como un fin e ideal meta frente al empleado. No porque estemos “condenados” a trabajar tal como lo establece la sentencia milenaria de “te ganarás el pan con el sudor de tu frente” sino porque el trabajo, cualquiera sea su móvil, es inherente al crecimiento integral del ser humano.

El conocimiento como insumo-valor

Ejemplos como Foxconn siempre habrá porque existen emprendedores con carencia de sentido común y amplitud de criterio, tal como también ocurre en la sociedad. Como contrapartida, es muy relevante el número de empresas –de todo tipo y tamaño– que en la presente década han descubierto el rol central que tiene el empleado en una organización como “proveedor” de conocimientos, creatividad e innovación.

La sobreoferta de productos-servicios existente, sumada a la gran similitud y prestaciones, terminó licuando el factor de diferenciación que durante décadas caracterizó a las marcas. Ante tal comoditización, la ventaja competitiva que caracterizaba a las propuestas y soluciones de una empresa, ha debido migrar hacia el conocimiento e integrarla como propuesta de valor.

Para los que se encuentran identificados con la necesidad de posicionarse en una actividad-meta, la comoditización derivada del título de grado o posgrado también es una preocupación. ¿Por qué? Porque las empresas vienen haciendo los mayores esfuerzos para ser reconocidas y aceptadas frente a clientes cada vez mejor informados y en ejercicio del poder, motivo por el cual necesitan sumar gente con talento y empowerment en todas las áreas.

El rol del Personal Branding

El perfil requerido del empleado, desde la mirada de una organización, hoy es un recurso escaso. Si bien hay legiones de profesionales para cualquiera de las áreas o departamentos de la empresa, éstas tienen grandes dificultades para lograr el personal adecuado. La mayoría disponible de los que se postulan piensan, creen y actúan uniformemente, tal como si fueran “robots”.

¡El portador de Tu Marca Personal no sólo está capacitado para brindar la mejor solución. También es el que está en mejores condiciones para gestionar y potenciar el valor derivado del conocimiento!

José Podestá

El Testimonio como Valor

04 septiembre 2011 ·

En los últimos años la migración de las búsquedas laborales y profesionales fue dándose desde el tradicional aviso o clasificado en los periódicos a la versión online. Luego se sumaron los sitios Web de empleos tradicionales y las redes sociales –LinkedIn, Xing y más recientemente Facebook.

Las ventajas de Facebook

Fundamentalmente radica en el valor de las recomendaciones de sus contactos, además de su liderazgo global en usuarios. Si bien el porcentaje de contrataciones a través de Facebook por ahora no es significativo, no deja de ser un referente de consultas por parte de los reclutadores.

Esta realidad impulsó a Monster.com, un líder en anuncios de empleos y currículums en línea, lanzar su propia aplicación en Facebook. Pero tampoco es el único que tomó tal decisión.

El poder de la conversación

Pocos recuerdan o supieron del Manifiesto Cluetrain del año 1999. El mismo se constituyó en un estupendo anticipador de las tendencias que se estaban derivando de la aplicación práctica e inteligente de las tecnologías y los cambios culturales y sociales. La primera tesis que enuncia el Manifiesto hoy es un factor clave y vital para entender y comprender qué está sucediendo con las personas, tanto en el ámbito concreto y real como en el virtual.

El compartir ya está instalado no sólo en las redes sociales sino también en la vida de relación y el trabajo. Efectivamente, hasta los empleados están en “estado de conversación”, manifestando sus puntos de vista y experiencias, las críticas hacia sus supervisores o simplemente su agenda del día con las conclusiones alcanzadas al final de la jornada. Aquí ya no importa tanto en qué plataforma se comparte y conversa sino la espontaneidad y el valor que ello tiene.

Testimonio y conversación

La fortaleza que representa el compartir, determina que cada vez más personas decidan escuchar la opinión de los otros, previo al momento de tomar una decisión. En marketing no es algo nuevo, pero sí el valor que ello luego tiene para el logro de la retención y fidelización del cliente. Más aún, gracias a la práctica de compartir boca-boca las experiencias y emociones derivadas de la satisfacción o no de un producto- servicio, algunas marcas han optado por esta técnica en reemplazo de la publicidad. Los casos Starbucks y Amazon son elocuentes ejemplos.

Tal vez no todos los portadores del Personal Branding tengan en claro el valor referencial que tiene el testimonio de sus pares para el desarrollo profesional, especialmente cuando ésos quedan expuestos en las redes sociales y a la mirada de los reclutadores. No se trata de hacer, de ahora en más, las cosas con el afán prioritario de lograr que los otros hablen de uno. Pero sí de tenerlo muy en cuenta por las consecuencias positivas o negativas que ello pueda tener mientras se está construyendo, desarrollando y posicionando el proyecto personal.

¿Por qué hablan de uno?

Por las cosas buenas o malas que uno suele realizar, y también por envidia. Pero en este último caso poco importa cuando uno está plenamente abocado, con honestidad, al Personal Branding. Aquí es mucho lo que está en juego –el futuro laboral-profesional y social– lo que nos hace ser más cautelosos frente a aquellas circunstancias atractivas que poco y nada pueden llegar a sumar en el proyecto.

En consecuencia, la persona que está concentrada en la visión que pretende alcanzar, sabe muy bien que la referencia testimonial derivada de su habilidad y estilo de cómo viene haciendo las cosas, son factores clave que hasta pueden anticipar en el tiempo el logro del plazo u objetivo fijado.

¡Tu Marca Personal no es una herramienta-solución mágica. Pero sí el compromiso, sumado a la integridad profesional, que luego facilitará a que los otros brinden testimonio espontáneo de uno, con el valor referencial que ello tiene en un mundo que vive en estado de conversación!

José Podestá

Compromiso Profesional y Algo Más

28 agosto 2011 ·

En el ámbito docente, tanto en carreras de grado como posgrado, uno tiene la oportunidad de interactuar con alumnos y profesores de distintas orientaciones. Contrariamente al paisaje que se daba en décadas pasadas, en donde imperaba en la mayoría de los alumnos el deseo de aprender y en el docente un compromiso de rigurosidad y calidad, hoy se observa mayoritariamente un devaluado interés en ambas partes: un alumnado desmotivado, con deseos de ir “pasando” materias y profesores que han licuado y revertido la pasión de enseñar por la de conversar y compartir. El resultado de ello luego se materializa y percibe en el magro nivel de conocimientos y habilidades del profesional egresado.

Del 90-10 al 10-90

En el ayer, nueve de cada diez alumnos –incluso los que trabajaban– se esforzaban por aprender, avanzar en la carrera y autosuperarse, convencidos de la importancia que ello tendría en la profesión elegida. En este entorno el rol del profesor era clave, brindando calidad académica-pedagógica, pasión, transmisión de experiencias y orientación.

Hoy la relación está literalmente invertida. El diez por ciento es el que estudia y hace la diferencia, mientras el resto sólo cumple con “el trabajo” de ir a la universidad, tal como ocurre con la gran legión de trabajadores desmotivados que, diariamente, se dirigen a sus empleos sin saber para qué lo están haciendo. Y como están aburridos en clase, tratan de paliar su propio tedio y “sacrificio” chateando a través del celular o simplemente navegando por el éter en búsqueda de la nada.

Al final de la carrera estos alumnos quedan expuestos al momento de la verdad. La mayoría cree que podrá postularse para acceder a las mejores empresas, con la ilusión de ganar un buen sueldo. Pero al poco tiempo sobreviene la frustración, por las carencias y la inseguridad personal derivadas del entorno laboral.

El síndrome de ilusiones no correspondidas

Ante la realidad descripta, no todos se encuentran luego preparados y con la estima en alto para superar el tiempo perdido y la oportunidad desaprovechada en la universidad. Sobreviene el momento de las culpas compartidas, la proyección del problema a terceros y la falta de sensatez y valor para salir de este nuevo estadio de frustración.

Las consecuencias de esta situación, fruto de una adolescencia tardía no resuelta, se irán revirtiendo en función de la toma de conciencia del involucrado y el deseo por cambiar.

En dónde estuvo el error

La universidad todavía es uno de los eslabones clave para la formación profesional. Sin embargo, ya no lo es como algunos creen o sueñan. ¿Por qué? Porque en la mayoría de las universidades las carreras de grado han devenido en propuestas uniformes, del tipo “me too”, y con programas devaluados en rigor académico, pero funcionales a un alumnado que presenta dificultades estructurales de comprensión y atención.
En consecuencia, el profesional egresado que pretenda llevar adelante “su proyecto profesional”, necesitará suplir esta carencia accediendo a otras fuentes de conocimientos.

Para poder constituirse en el artífice de esta superación, un camino posible es reconstruir la cadena de valor personal en función de la visión que se desea alcanzar en un plazo determinado. La misma luego deberá guardar relación con la estrategia vinculada al proyecto personal-profesional. En tal sentido, el proceso conducente que hoy se sigue para plasmar y gestionar el Personal Branding es una instancia-recurso que el interesado no debiera subestimar.

¡Si bien la graduación universitaria se ha tornado en un “commodity” aspiracional de mejora y consideración, sólo tendrá sentido a partir del valor agregado que su portador sepa potenciar mientras avanza en el desarrollo y posicionamiento de Tu Marca Personal!


José Podestá

Acerca de las Crisis Recurrentes

21 agosto 2011 ·

La Sociedad Informacional no sólo penetró en la cotidianidad y en la vida de relación de las personas sino que también contribuyó a la licuación de muchas normas, usos y costumbres. Y no conforme con ello, pasó a constituirse en uno de los vectores de la aceleración del cambio.

Tales consecuencias, sin embargo, no necesariamente deben ser vistas como negativas. Así como nos ha conducido a la democratización de la información, el acceso a las tecnologías sobre la cuales sustenta la nueva sociedad viene además generando una mayor participación y colaboración de los ciudadanos. Cada vez más, éstos ejercen su poder –incluso indignación– manifestando qué cosas comparten o rechazan en diversos ámbitos: laboral, social, político, ambiental, de consumo o cultural. De allí que es razonable decir que hoy vivimos en “estado de conversación” cotidiano, incluso en lo laboral y profesional.

Fruto de la aceleración del cambio y del entorno tecnológico-cultural, hay cada vez mayor cantidad de individuos que toman pleno conocimiento de las tendencias, se preparan para ello y también lo comparten con terceros. Esto hizo y hace que, en el plano formal jefe-empleado, existan frecuentes conflictos toda vez que el empleado ve que la conducción y responsabilidad de sus superiores no guarda relación con las demandas del momento. De no mediar una toma de conciencia de ello se terminará arribando a una crisis, con lo que esto implica.

En el ámbito de las organizaciones desde ya que existen otras crisis que son, generalmente, funcionales con la actividad que desarrollan. Pretender evitarlas no es fácil ni sencillo, pero sí el poder anticiparlas y gestionarlas. En estos casos podemos decir que son crisis que tienen que ver con las consecuencias que emanan de determinadas políticas o intereses, incluso las provenientes del ámbito sindical-laboral.

También están las crisis ajenas a nosotros y que se derivan por motivos y decisiones de terceros, especialmente en el plano político-económico. Lamentablemente venimos asistiendo, literalmente como espectadores y destinatarios finales de sus consecuencias, al agotamiento del sistema capitalista de consumo. Cualquiera sea la categoría de producto-servicio que uno desee imaginarse, lo cierto es que existe una gran sobreoferta a punto tal que lo que sobran son productos-servicios y lo que faltan son clientes.

Frente a ello, hasta ahora no se vislumbra en el sistema una solución o intento de cambio. Por el contrario, como se necesita “vender” se acortan los períodos de obsolescencia y se estimulan las ofertas para que el cliente-consumidor haga el recambio de modo más frecuente. Muchas veces esto no solo genera estrés sino también la sensación de estar trabajando y viviendo, simplemente, para pagar cuotas cada vez más prolongadas y altas.

Esta práctica reiterada y sin sentido, más allá del importante despilfarro que implica en términos de recursos de todo tipo, termina agotando finalmente a las empresas e impulsándolas a reducir personal, sumándole a la sociedad un nuevo conflicto social.

Qué puede hacer el Personal Branding

Depende de la motivación y los valores personales de su portador. Una persona que logró un posicionamiento exitoso y acorde en el desarrollo profesional, podrá estar también en excelentes condiciones de aportar soluciones en el ámbito en que se encuentre. En cambio, los que lo han hecho motivados sólo por un afán de dinero y poder, tal vez estén menos predispuestos a ello y hasta en algún momento podrían llegar a ser una víctima más del sistema.

¡Tu Marca Personal es la mejor respuesta para calificar y ser tenido en consideración en un entorno masivo y de iguales. Pero también hace al compromiso responsable que la sociedad hoy espera de todos aquellos que posean las capacidades para brindar nuevas soluciones al bienestar general!



José Podestá

Trabajo Ideal vs. Real

07 agosto 2011 ·

En el mundo de la ilusión y la fantasía, todo es posible. De allí que a veces uno sueñe con alcanzar una mejor posición en la empresa o, tal vez, ingresar en otra por la alta percepción que se tiene de su imagen, trato al personal y proyectos. Desde ya que soñar algo así no es necesariamente malo, salvo que uno luego permanezca pasivo y a la espera de algún milagro.

Entonces, el desear una mejora de cambio, cuando ésta se transforma en algo motivador, es una buena alternativa para ponernos en acción. Al mismo tiempo, es útil para comenzar a pensar en las cosas que nos falta para acreditar la idoneidad necesaria que luego sirva para llamar la atención de nuestro destinatario, para que se interese por uno.

De lo que se trata es de ser lo suficientemente hábil al momento de balancear nuestra aspiración ideal con lo concreto y real. Esto es clave y muy importante. ¿Por qué? Porque si nos dejamos dominar por nuestras emociones, se estará a un paso de ingresar en un fracaso, con las consecuencias negativas que esto implica.

Pensar en el trabajo ideal, en una organización o profesión, es una tarea que no se debiera delegar. Sin embargo en la práctica la mayoría de las personas lo hacen, toda vez que se ponen a mirar cuál es la oferta laboral existente, para luego optar por la menos mala o bien por la que más atracción produzca. Este tipo de comportamiento es bastante habitual, y está muy arraigado en la gente, porque así se vino haciendo a lo largo del tiempo. A veces salía bien, pero en otras no. En ambos casos, el resultado terminó siendo la consecuencia de una oferta u oportunidad dada.

Otras personas, cuando sueñan con el cambio lo hacen a partir de una actitud proactiva que tiene, como norte, el diseño del trabajo ideal. Esto les permite, desde el vamos, discernir acerca de los trabajos reales que poco o nada tienen que ver con su proyecto personal. Mientras en la empresa les hablan de carrera laboral, ellos piensan y diseñan sus proyectos profesionales, con plazos y acciones propios.

Tal vez alguno se pregunte qué pasa cando una persona se quedó sin trabajo y necesita acceder a lo primero que encuentre. El sentido común y la razón indican que no está mal que lo acepte, pues a fin de mes necesitará hacer frente a los gastos fijos, más allá del estupendo diseño del trabajo ideal que se tenga. Aquí está claro que uno debe saber discernir entre las situaciones de urgencia, como el haberse quedado sin trabajo, de lo importante, es decir, del proyecto personal-profesional.

Cuando una persona tiene inquietudes derivadas del trabajo ideal y el real, es porque no está predispuesta a hipotecar su futuro en algo que no le permita alcanzar un razonable horizonte laboral, profesional o social. Esta actitud frente al trabajo es además propia y funcional de los nuevos paradigmas que se vienen dando en el contexto y que terminan luego impactando en las personas, aunque no todos se den cuenta de ello. Pero también es consistente con la necesidad que hoy tienen las organizaciones acerca del nuevo perfil de sus empleados.

¡Sabiendo que del trabajo ideal deviene el trabajo real que pueda sumar valor a un negocio o profesión, el portador de Tu Marca Personal es en definitiva el que mejor preparado está para hacerlo y ser tenido en cuenta!

José Podestá

Motivación y Pasión

31 julio 2011 ·

No hay algo tan frustrante y agotador como el estar trabajando o ejerciendo una profesión sin vocación ni real interés. A pesar que algunos manifiestan que lo hacen porque “de algo hay que vivir”, ello no los excluye al final de la jornada de padecer consecuencias diversas tales como agotamiento y malestar físico o sentirse mal consigo mismo, con la repercusión que ello tiene para terceras personas.

La vida tiene un sentido que no todos llegan a tener en claro. Por tanto, para no ir “pateándola” sin rumbo fijo, es necesario que hagamos el esfuerzo-tarea para descubrir cuál es su significado. No existe un único sentido para todo el mundo, sino tantos como individuo-persona somos. Hemos venido al planeta Tierra para llevar adelante un propósito-misión. Por tanto, el sentido de la vida se nos irá revelando y acompañándonos a lo largo de muestro ciclo biológico.

Cómo se hace

Empezando por formularnos algunas preguntas básicas y profundas, como ser:

¿Quién soy yo? ¿Cuál es mi misión? ¿Qué habilidades naturales percibo que están incorporadas en mí? ¿Qué es lo que me motiva hacer o dedicarme en la vida?

Para dar respuesta a estos interrogantes no es necesario recurrir al psicólogo, salvo que uno tenga alguna dificultad psíquico-fisiológica. Se trata, en realidad, de un trabajo personal y de introspección, al que debe destinarse el tiempo y el espacio necesarios.

Esta tarea, además, tiene un doble beneficio:

a. Permitirnos darnos cuenta hacia dónde me conviene ir y porqué. De allí que debemos ser muy honestos consigo mismo.

b. Es funcional al trabajo de apertura que deben y tienen que hacer los que están interesados en ser los constructores y desarrolladores del Personal Branding. De ello dependerá el suceso que en el mediano plazo esa persona pueda alcanzar, en lo laboral-profesional o social.

Como podemos ver, aquí no hay nada mágico. Se trata de llegar a tener en claro para qué estamos aquí, hacia dónde uno siente que debería ir o estar y la razón de ello.

Motivación en acción

Seguramente que alguno de ustedes tuvo la oportunidad de conocer a seres que hicieron o hacen las cosas con una alta dosis de convicción y energía, sin claudicar pese a las adversidades o dificultades propias de la vida. Si a esas personas la miramos a los ojos, descubriremos en ellos una chispa o energía de juventud, aunque se trate de personas adultas o muy mayores.

Ello es un indicio elocuente de la motivación latente y manifiesta que vibra en su interior, y de la pasión que ponen en lo que hacen. Llegar a ese estadio los hace sentir que se encuentran en el camino correcto, lo que para nada significa conformarse con lo hecho sino en saber cómo ir ejerciendo la flexibilidad sin perder el norte y gestionar, de forma inteligente, los sacrificios que se tengan que afrontar. Así, uno termina descubriendo el sentido de su existencia.

¡Nuestra vida es un don precioso y único que jamás deberíamos dejarlo en manos de terceros. Esto lo saben muy bien los portadores de Tu Marca Personal, porque no sólo se prepararon para ello sino porque vienen diariamente trabajando en esa dirección!


José Podestá

Estar Bien No Siempre Está Bien

24 julio 2011 ·

A veces puede ocurrir que el Plan de Desarrollo Personal ingrese en un estadio de estancamiento, no porque algo no se esté dando como debiera ser sino porque otras motivaciones o sentimientos de valor hacen que uno opte por conformarse con lo logrado. Esto para nada está mal, en la medida que se tenga plena consciencia de tal convicción.

Pero también es útil aprovechar el alto para preguntarse acerca del por qué de ello, especialmente cuando uno está confundido de cómo se llegó a tal situación. Felizmente hoy en día ya no se siente o se viven los sucesos no deseados como algo meramente negativo. En la medida en que activemos nuestra inteligencia, seguramente que aflorarán algunos elementos clave que no fueron tenidos en cuenta. Al darnos cuenta de ello, estaremos sumando conocimiento y aprendizaje, de modo que si estamos atentos seguramente no volveremos a transitar por la misma situación.

Otra motivación de este “alto en la huella” quizás tenga que ver con la sensación de estar atravesando o capitalizando una situación de seguridad y confort en la empresa –por ejemplo, un buen clima laboral o vínculo de gran empatía con el director del área. A partir de la toma de consciencia de ello, pasará a ser una decisión eminentemente personal el quedarse a convivir en esa meseta o retomar la huella que la condujo hasta allí, para seguir con el plan previsto.

En todos estos casos uno puede no haberse dado cuenta o bien haya sido cómplice para que las cosas se dieran así. Ahora bien, la situación puede tornarse más complicada y difícil cuando, fruto del amesatamiento de la carrera, esta persona se encuentra desde hace un par de años sin obtener la promoción que había aspirado alcanzar tiempo atrás.

¿Cuál es la percepción de esta encrucijada?

Del lado del afectado, y si tiene bien en claro los objetivos y etapas que se trazó como plan, ponerse a trabajar en las eventuales limitaciones para poder revertir la situación. Es decir que, proactivamente, estará demostrando a quienes deben dar curso a su promoción, que está “trabajando” para ello.

Del lado de la empresa, pudiera estar incidiendo la sensación de tranquilidad que esta persona demuestra ante sus directivos, motivo por el cual no sienten motivación ni razón alguna para generar su promoción.

Es por ello que en Personal Branding es muy importante tener siempre en claro quién es nuestro “mercado-cliente” y las razones que éste tendrá en cuenta para facilitarnos el logro propuesto. Caso contrario, sobre la marcha se presentarán obstáculos para uno, pero muy buenas evidencias para el que debe tomar la decisión esperada.

El estar bien como limitación

Si el personaje de nuestra historia opta anclarse en esa meta, por algunas de las razones ya mencionadas, nada más se llegará a cuestionar. ¿Por qué? Porque llegó a descubrir algo no previsto, pero que lo satisface.

Si el personaje vislumbra que se tiene de él la percepción de un ser eficaz pero muy conforme con la posición ocupada, seguramente que sus superiores preferirán que se quede allí. Y si ello se arraigó como una creencia-opinión, por ser ésta difícil de cambiar o revertir, no le quedará otra opción que partir hacia otro destino.

En este caso podrá darse que la empresa también decida, luego que éste haya anunciado su partida, ofrecerle un cambio lateral. Nuevamente, aquí el destinatario decidirá afirmativamente o no en función del timing de su plan personal. Sin embargo, vale la pena tener en cuenta que la lateralidad del movimiento jerárquico no necesariamente debiera ser visto o considerado como un descenso o distracción, sino como un pasaporte que generalmente habilita al logro de un cambio de posición en el corto-mediano plazo.

¡Para el portador o desarrollador de Tu Marca Personal, el estar bien en una posición sólo será una amenaza si termina bloqueando sus aspiraciones. Caso contrario, es un indicador del merecido disfrute por la meta alcanzada y, quizás, un punto de partida para el diseño de una nueva visión!


José Podestá

Los Padres Encaran al Jefe de su Hijo

17 julio 2011 ·

Los tiempos cambian y traen sorpresas impensadas, como ser que los padres opinen e intervengan en los procesos de trabajo de sus hijos, “interpelando al jefe”. Algo real y en pleno desarrollo.

Si bien para muchos puede producir una sensación de absoluto rechazo y de difícil asimilación, no debería ser el comportamiento y respuesta adecuados. ¿Por qué? Porque estamos frente a una generación que viene con una impronta de cambio, valores y comportamientos que nada tienen que ver con el “deber ser” del ayer; tengamos también presente que los padres, en mayoría, han claudicado en el ejercicio de las normas básicas de autoridad y territorialidad con sus hijos, con lo cual ambos se mueven e interactúan en un contexto de límites ausentes y licuados.

La Generación Y, pues de ellos se trata, trabaja escuchando música con sus auriculares, a la vez que atiende las indicaciones de su jefe, parte al gimnasio en horario laboral, trata a todo el mundo de manera informal –como en casa– y conversa con sus padres sobre su situación laboral, su relación con el jefe y lo que éste le observa e indica.

Estamos ante un modelo de autoridad diferente y de “cercanía”, lo que conduce a la práctica literalmente espontánea de relaciones de vínculos estrechos. De ello luego deviene la práctica de una “relación-demanda” hacia el jefe, por parte de los padres, que se sienten con el “derecho” de saber el por qué de las decisiones que afectan el desarrollo de la carrera laboral de sus hijos.

Un paradigma nuevo

Todo parece indicar que esta “innovación”, que lleva implícita una dosis de adolescencia e inmadurez tardía del vínculo padres-hijo, hace que “todos” terminen siendo parte de un vínculo que impacta en la manera de desarrollar el trabajo y las relaciones. Pero también es un factor de conflicto potencial para la empresa, porque a partir de las decisiones aplicadas al empleado, por ejemplo una eventual promoción o traslado a otra filial como parte del plan de carrera, ahora podrá ser mínimamente pasible de un pedido de explicación por parte de terceros.

Con ello a la empresa se le suma, al problema de la renovación generacional y la carencia de talentos, la demanda de los padres que deben atender y gestionar adecuadamente. Para ello, tienen que contemplar la capacitación al personal ejecutivo para que más allá de sentirse sorprendidos por tal interpelación, sepan cómo obrar en consecuencia.

Lo importante es entender esta realidad y darse cuenta que se está ante un cambio cultural que, en definitiva, es diferente.

Algunos ya son gerentes

En la actualidad ya existen representantes de la Generación Y que ocupan posiciones ejecutivas en las empresas, mientras otros son emprendedores exitosos. Ello es un buen indicador de la capacidad, potencial y solvencia que cuentan para ejercer el liderazgo formal. Por otra parte, son los que mejor capitalizarán el Personal Branding debido a la forma y estilo que los caracteriza en la gestión de vínculos y relaciones.

¡Más allá de lo que implica el ejercicio de la “conversación” de los padres con el jefe de su hijo, en la medida que la empresa cuente con un interesante proyecto para la Generación Y, estará posibilitando que los mejores lleguen a ser los futuros portadores de Tu Marca Personal. A partir de ese momento, la interpelación de sus padres será una anécdota del pasado!


José Podestá

¿Por Qué No se Planifica el Posicionamiento Laboral?

10 julio 2011 ·

Por diversas razones, según sea la actitud o resistencia de cada individuo. Quizás se le destine un tiempo prudencial y minucioso a planificar las vacaciones o un viaje al exterior y en cambio no se le destine, ni cinco minutos, a planificar el desarrollo y posicionamiento de la trayectoria laboral-profesional o social.

Podemos afirmar, al respecto, que al Personal Branding le sucede lo mismo que a la Orientación Vocacional. Una gran mayoría de los adolescentes esquivan invertir tiempo para descubrir-saber en qué rama de la gran sobreoferta de carreras universitarias hoy disponibles realmente sienten “pasión y motivación”. En cambio, optan por seguir al rebaño o ajustarse a lo clásico, es decir, a las profesiones que fueron propias del ayer.

¿Esto a qué conduce?

A la frustración, sin escalas, por haber errado de vocación o intentar probar suerte con otra especialidad, tal vez con el mismo factor de ocurrencia de repetir el mismo suceso.

Se trata, por cierto, de algo difícil de comprender o admitir. En épocas de nuestros abuelos, el carpintero, el herrero, el panadero o el médico, eran seres decididamente orientados a su oficio-profesión. Quizás lo descubrieron por necesidad, oportunidad o vocación, pero una vez que tomaron la decisión, se volcaron con pasión y amor a su realización. Así muchos de ellos, sin saberlo, terminaron construyendo y desarrollando su Personal Branding gracias al estilo-talento y compromiso asumidos.

Por la cultura hoy imperante, son muchos los que adhieren al estereotipo del ser profesional-universitario. Se parte, sin mayores razones, de la creencia que disponer de un título universitario es la garantía necesaria para llegar a ser “alguien en la vida”, sea como ejecutivo de empresa, profesional o dirigente social. Sin embargo, la realidad nos muestra algo diferente: hay millones de profesionales con título universitario – y hasta de posgrado y doctorado– que no ejercen, se sienten devaluados y lo que es peor, miembros de la gran cofradía de los NN: seres sin reconocimiento ni marca personal.

Pretender justificar esta realidad con la consagrada expresión “no tuvo suerte”, es tratar de cambiar el tema de discusión. Ningún título, incluyendo Tu Marca Personal, es garantía de nada. Recién lo es o será cuando su portador le sume valor y lo dignifique con el correcto hacer. Y para ello no se necesita depender de “la suerte” sino, más bien, de cuán buenos constructores somos de la buena suerte personal.

¿Y cómo se hace?

Sumando al trabajo el talento, amor y pasión que uno siente por la actividad o profesión elegida. Así lo hicieron, tal vez sin saberlo, los artesanos y profesionales del ayer, cosechando el reconocimiento, estima y lealtad de sus clientes.

El posicionamiento laboral-profesional

Para poder “ser alguien” en el oficio, trabajo o profesión elegida, se necesita no sólo hacer muy bien las cosas sino también integrarlas al plan laboral-profesional. ¿Por qué? Porque es necesario que uno mismo sea el artífice y constructor de su plan de carrera, reservándose para ello el control y adaptación continuos. Y para ello es necesario tener, bien en claro, la estrategia –el qué y el para qué lo hago– y la táctica o plan de acción.

En consecuencia, el tiempo que demanda trabajar en el modelo del posicionamiento deseado, es lo suficientemente importante, vital y clave para que luego uno no termine cediendo en terceros –el jefe, patrón o gerente– la imposición de requerimientos que nada tienen que ver con nuestra meta.

¡Ser portador de Tu Marca Personal es una decisión plena y muy gratificante. Demanda tiempo en su concepción y realización, porque se va construyendo y modelando sobre la marcha. Y porque vale la pena, es necesario planificar!

José Podestá

 

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