Si bien no todos cuentan con las habilidades,
competencias o motivación para llevar adelante un emprendimiento profesional,
no sucede lo mismo en materia de formación personal. Más allá de la importancia
que brinda el estudio en sí mismo para el acceso a la movilidad social, los
cambios que vienen de la mano de la tecnología, la robótica y la inteligencia
artificial /IA, hacen que las personas comiencen a “pensar” acerca de su aprendizaje autodirigido.
La
educación formal no es suficiente
Ya en otra oportunidad mencioné que la enseñanza
académica o formal ha pasado a tener un rol reactivo, no porque lo deseen así,
sino porque durante el tiempo regular de una carrera universitaria –cuatro o
cinco años– los programas de las asignaturas van quedando fuera de la realidad,
especialmente en nuestro caso en las disciplinas que tienen que ver con el
mundo de las organizaciones y de los negocios en general.
Los que hoy se encuentran trabajando en industrias
que van desde la automotriz hasta los productos de consumo, saben y “sienten”
la necesidad cada vez más frecuente de acceder a diversos programas de
educación y desarrollo de habilidades, para no verse perjudicados en sus
objetivos personales. Por tanto, también vale para aquellos que aspiran a
ingresar o hacer “carrera” en el mundo laboral.
Entonces, ¿qué nos dice la realidad? Que las cosas
ya no son como eran hasta hace poco tiempo atrás o cómo me las imaginaba. Si lo
que pretendía era ingresar en una organización para poder solventarme los
gastos de estudios de “mi” carrera, además de ello deberé en la mayoría de los
casos también “estudiar” en la organización acerca de las nuevas y cambiantes
formas de llevar adelante la responsabilidad del puesto asignado.
Quizás algunos sientan que las nuevas habilidades
que necesitan “aprehender” no les servirá de nada, tanto para su profesión como
en la futura empresa: ¡Error! Todo conocimiento hace a la sumatoria de “poder”
que uno va asimilando, para luego poderlo ejercer en la vida de relación. En
última instancia, hasta podrá servirte como “conocimientos generales” de algo
que tuvo o tiene un sentido en el tiempo cultural en que te toca vivir.
Ecosistema
de aprendizaje
Para aquellos que consideran que el trabajo laboral
actual es sólo una instancia económica en vista de la carrera profesional, ello
necesariamente no debería ser tomado de un modo absoluto. ¿Por qué? Porque hoy
nadie puede asegurar que un proyecto o plan de carrera excluya al ámbito de las
organizaciones. Así como las profesiones tradicionales han tenido su inserción
–abogados, médicos, contadores, psicólogos, ingenieros,…– también se han sumado
desde no hace mucho tiempo filósofos, antropólogos y sociólogos, entre otros.
Todo ello dependerá del sentido aspiracional que
cada uno tenga en la profesión elegida. Pero lo cierto es que el aprendizaje ya
pasó a ser permanente, contándose para ello con distintas opciones más
eficaces, en función del objetivo perseguido.
Si bien el aprendizaje
autodirigido requiere de gran compromiso y “disciplina” interna, no por
ello debiera ser percibido como una “carga” adicional, porque, en definitiva,
forma parte del proceso de desarrollo laboral y profesional que cada uno tiene
en función de su proyecto personal.
También se viene prestando mayor atención a las
“habilidades” intangibles o blandas, como ser la inteligencia emocional, la
curiosidad, la resiliencia, la oratoria, la escritura. Sabiendo de ello, está
en cada uno considerar el momento y la forma de incorporarlas, a través de los
soportes o plataformas que consideren más pertinentes.
De esta forma la persona estará mejor preparada no
sólo en lo laboral-profesional, sino también para los vínculos y las
relaciones. Al respecto, no debemos olvidar que más allá de contar uno con una
“idea” brillante, ésta recién se logrará plasmar a partir del involucramiento
que sepamos motivar en los “otros”, es decir, en los que necesariamente son
parte del proceso. Y para ello no basta el conocimiento técnico, sino también
la puesta en práctica de las habilidades
blandas ya mencionadas.
El
Personal Branding lo necesita
Existen estudios que proyectan para los que ingresan
hoy a trabajar, que perseguirán entre cuatro y cinco carreras durante su vida
laboral. Esto requerirá de herramientas más flexibles para el reentrenamiento continuo.
Mientras la carrera universitaria nos entrena para
equiparar lo que hacemos con lo que somos, el aprendizaje autodirigido nos impulsará a adquirir el pensamiento
crítico y las habilidades flexibles que se amalgamen en el contexto de cambio
permanente.
De allí que el interesado en su Personal Branding
necesita saberlo de antemano, porque de su accionar dependerá lo esperado por
sus pares y, en definitiva, por la sociedad.
¡El portador de Tu Marca Personal
necesariamente es parte del cambio –o promotor del mismo– y para ello se
mantiene actualizado e informado en virtud de la responsabilidad que está
persuadido deberá asumir y tener ante sus prójimos!
José
Podestá