La globalización y la aceleración del cambio han
generado la presencia, en el contexto en que nos toca vivir, de cuatro
variables que tienen que ver con lo “volátil,” lo “incierto”, lo “complejo” y
lo “ambiguo”; es lo que se conoce por sus siglas como VICA.
No
es mejor ni peor, sino distinto
Mientras en el ayer la vida, el trabajo y el
desarrollo de las personas era bastante previsible frente a las oportunidades
existentes, para nada guardan relación en el hoy. El motivo de ello es que nos
encontramos ahora en un proceso de evolución e innovación continuo, debido al
cambio y el avance prácticamente exponencial de la tecnología aplicada en
múltiples órdenes de la vida.
Contrariamente a lo que se piensa, las nuevas
generaciones tienen por delante un gran desafío y oportunidad. Esto significa
que a las vocaciones tradicionales se
les han sumado otras que pasarán a ser centrales en los próximos años. De allí
que el cambio y la ampliación de enfoque son necesarios y fundamentales para
ser tenidos en cuenta, porque ya están aquí, es decir, en la realidad concreta
que anida fuera de nosotros.
Así como en el siglo pasado las personas canalizaban
su vocación a partir de aquella
actividad o profesión que les daba sentido a su misión en la vida, lo mismo vale para las nuevas generaciones y para
todos aquellos que sienten que deberán “reposicionarse” en lo que venían
haciendo y brindando a sus prójimos.
Nuestro
“interior” como punto de partida
Ya en otras columnas hemos alertado y fundamentado
que no podemos condicionar nuestro destino
personal para que los “otros” decidan por uno. Si bien hay individuos que
conscientes o no de ello se prestan a tal tipo de manipulación, es algo que no
debemos hacer ni permitir. ¿Por qué? Por la sencilla razón de que somos seres
humanos y no “objetos-cosa” al servicio y conveniencia de aquellos que aspiran
influenciar, condicionar o torcer el motivo-razón por el cual hemos decidido
venir a la vida. También es cierto que hubo y habrá situaciones extremas que
obligan a uno hacer lo que no se desea –muy propio de los regímenes políticos
extremistas, como así también de algunas organizaciones autocráticas. Es aquí
cuando el ser humano deberá extremar sus esfuerzos para evitarlo y denunciarlo
ante los organismos correspondientes; si bien muchas veces ello no es fácil ni
tampoco posible en el corto plazo, no por ello uno debe resignarse ante tal
adversidad.
Así como en el “mundo exterior” se dan las
oportunidades y los condicionamientos que luego podrán terminar impactando en
las personas, no debemos olvidar que en lo más profundo de nuestro “mundo
interior” está el ADN que contiene a la misión,
es decir, a la razón-motivo de nuestras respectivas existencias. De allí
también emergen nuestras habilidades o talentos que luego canalizaremos a
través de la vocación.
En consecuencia, se trata de una tarea básica,
necesaria y fundamental para el devenir de cada persona. Seguramente que
ustedes conocen casos de individuos que, desde pequeños, han anticipado a sus
padres lo que aspiraban llegar a desarrollar en la vida como vocación, por estar la misma a tono con
su misión. Sin embargo, existe una alta
proporción de seres humanos que no lo tienen en claro ni tampoco saben cómo
llevar a cabo tal “descubrimiento”. Para estos casos hay guías terapéuticos que
pueden asistir a esas personas a tomar conocimiento de ello y obrar en
consecuencia.
En cuanto al Personal Branding, el punto de partida
también remite a la misión y vocación del individuo. Caso contrario,
no sería posible que éste pueda llegar a posicionarse y desarrollarse, satisfactoriamente,
en el ámbito de la actividad o profesión elegida. Con ello queremos
desmitificar la creencia propiciada por algunos “expertos” que impulsan el
Personal Branding como la mejor salida y recurso, en los tiempos que corren, para
“conseguir rápidamente un trabajo” o constituirse de la noche a la mañana en la
“celebridad” del momento.
Entonces, en el presente mundo VICA es fundamental
estar bien “parados” como personas, a partir de la biografía, las habilidades-talentos
y la razón-motivo de la existencia. De esta manera, los así posicionados
contarán con los medios necesarios para llegar a hacer aquello que los acerca y
vincula con su respectiva misión.
¡El portador de Tu Marca Personal sabe que
para mantener el norte de su vocación, deberá ir equilibrando y ponderando el
mundo VICA con el ADN de su impulso interior!
José
Podestá