El desarrollo y la evolución continua no sólo
promueven la necesidad de la actualización del conocimiento y de los procesos
productivos, sino también de una mayor predisposición de las personas hacia los
vínculos y las relaciones. Y si de adaptación al cambio se trata, nuestro
organismo lo viene haciendo desde tiempo inmemorial, sin darnos demasiada
cuenta de ello.
El
pensar colectivo
Lo que más urge e importa en la empresa, de todas
las épocas, son los resultados al más bajo costo posible. Si bien en el ayer
existían seres que, individualmente lograban trascender por sus logros – como
el caso del “vendedor estrella”– en la actualidad el todo es mucho más
importante que la suma individual de las partes. Por tanto, lo que ahora se
impone es hacer las cosas de manera colaborativa, lo que supone pensar y trabajar colectivamente.
De esta forma se manifiesta como respuesta la inteligencia colectiva. Ello nos conduce
a desarrollar una nueva capacidad, a partir de la colaboración y la ayuda mutua
en un grupo de personas que pasaron a estar involucradas en un objetivo común.
En esencia y a raíz de las complejidades crecientes
que demanda el poder afrontar, con éxito, el logro de la estrategia y la visión
de la organización, es importante saber:
a. Cómo movilizar efectivamente las habilidades.
b. Cómo el empleado vinculado al proyecto puede
involucrarse y generar el valor esperado por su equipo.Muchos especialistas vislumbran que a partir de la inteligencia colectiva surgirán las respuestas a los nuevos problemas, oportunidades o desafíos a los que están expuestas las compañías, en general.
Empatía
y algo más
La inteligencia
colectiva no es un patrimonio exclusivo del ser humano. Este comportarse
también se da en las bacterias, insectos y animales. Lo malo de ello es que
nosotros, como seres inteligentes,
tardamos mucho más en darnos cuenta de su existencia y beneficios.
Es por ello que aquellos que se interesen en el
Personal Branding y se encuentren trabajando en su plan de carrera
laboral-profesional, deberán saber y contar con esta capacidad. Y si alguno le
cuesta entenderlo, les sugiero recordar el caso de Wikipedia, el sitio en el
que miles de personas desarrollan de forma colectiva –además de voluntaria– la
enciclopedia global más relevante por su calidad de contenidos y actualización
continua.
¡Pero cuidado! No basta con ser parte de un grupo ni
de integrarlo con personas inteligentes para obtener un resultado positivo.
¿Por qué? Porque agrupar gente inteligente no garantiza, necesariamente, que el
grupo lo sea. Es importante que cada uno cuente con la capacidad individual
desarrollada para que al actuar en equipo, “todos” puedan plasmar el
pensamiento colectivo oportuno. Para ello es importante tener incorporado:
a. La sensibilidad social, es decir, la capacidad
que posee una persona para captar el estado emocional de los demás, con solo
mirarlos.
b. El respecto por el timing del otro, es decir, tener equidad con el otro en el uso de
la palabra.
En la medida que una persona cuente con estas
habilidades, porque hacen a su nivel de inteligencia colectiva, perderá menos
tiempo en pugnas internas o competirá cuando sabe que “todos” ganarían si él
coopera. Lo importante, entonces, es darse cuenta que a través del obrar democrático
y participativo se estará hoy en mejores condiciones para encontrar las nuevas
soluciones esperadas del proyecto o de la profesión ejercida.
¡El portador de Tu Marca Personal no es ni
debe ser necesariamente un fuera de serie, pero sí un individuo que sabe hacer
un uso pleno de su inteligencia colectiva!
José
Podestá